Concurso Semanal, "Creando Historias Semana #12". ¿Tarjeta o Ciudad Electrónica? Por @charosierra19

La mente es un prodigio y no tiene comparación ni siquiera con la inteligencia artificial; porque somos los creadores de esa realidad inteligente que nos lleva al mundo mágico de la electrónica y la virtual.

Esto es una pequeña muestra del poder del cerebro y es tan así que viaje a través de la imaginación, llegue a una linda ciudad limpiecita, muy alumbrada y con muchas construcciones, la tenía entre mis manos y absoluta la miraba, caminaba por sus calles con puentes de Circuitos Integradores, un alumbrado público con muchos Leds, edificios de transformadores, osciladores y bombonas de gas a granel como cuáles resistencias con diferentes colores. Estaba absorta, maravillada, parecía la Alicia en el País de Las Maravillas; pero mis hijos no entendían porque estaba en estado catatónico y me llamaban, me tocaban y allá a lo lejos detrás de un condensador que un señor cambiaba, apenas se escuchaban voces de mis hijos llamándome, no quería salir de la fantástica ciudad electrónica, me fui al hotel de 3era. avenida y en su terraza almorcé, compartí con unos amigos todos ellos técnicos, reparaban las luces, cambiaban los chip, los circuitos integradores, las resistencias y le hacían mantenimiento a los puentes, revisaban la fuente energética. Total, era una ciudad con buen personal de mantenimiento que se esmeraba por una buena calidad de servicios básicos, embellecimiento y operatividad.

Yo seguía absortada, continuaba viajando con mi imaginación, pero vi un chispazo de candela, energía eléctrica pura, me despertó volví a la realidad y mis hijos me preguntaron: ¿Mamá que tienes, qué te paso? Y muy preocupados por verme así, me abrazaron y aproveche para decirles: mis hijos, estaba en una ciudad bellísima, no quería, pero aquí estoy y la volveré a visitar. Mamá no sabemos de qué ciudad hablas, lo que tienes en la mano es una tarjeta madre de un televisor de última generación, dijo el mayor de mis hijos, porque mi hija y mi nieta aún estaban sorprendida de lo que me había ocurrido.

Salí definitivamente de ese estado hipotético, desperté, volví a la realidad y miré lo que tenía mis manos y pregunté: ¿Tarjeta o Ciudad Electrónica?