Historia: El paisaje del sueño

Hoy les comparto una historia basada en el increíble dibujo digital del amigo @xpilar.

Me encontraba en mi taller de arte buscando inspiración para realizar una nueva obra artística. Tomé mi teléfono celular y comencé a verificar en mi bloc de notas todas las ideas que había estado plasmando para llevarlas a la vida real algún día.

Era de noche y se escuchaban las cigarras fuera del taller. La Luna brilaba intensamente, sin darme cuenta y como consecuencia de haber tenido un largo día de trabajo, me quedé dormida profundamente.

Comencé a tener un sueño sumamente irrealista, donde me encontraba en una especie de bosque colorido, pero yo era sumamente pequeña, incluso las flores silvestres ahora eran 5 veces más grandes que yo. Me sentía como Alicia en el País de las Maravillas.

Emprendí una caminata para explorar el lugar, el cual parecía solitario. En ese momento, apareció un pequeño conejo enérgico quien era un poco más grande que yo. Al principio le sonreí y me parecía muy lindo, pero luego pensé que quizás me vería como comida, lo cual me hizo aterrarme y dar dos pasos hacia atrás.

El conejo me miró a los ojos y en mi mente se escuchó su voz diciéndome "Tranquila, los conejos no comemos carne. Súbete a mi lomo para darte un recorrido por el lugar, será divertido". Esto me sorprendió pero recordé que estaba en su sueño, así que hice caso a sus palabras y le agradecí, ya que alguien de mi tamaño no podría explorar muy rápido la zona a pie.

El conejo comenzó a saltar y de tal forma recorrimos el lugar, el cual parecía una linda pradera llena de las flores silvestres. El viento me rozaba y me sentía muy en paz, sin preocupaciones.

En un momento donde estaba distraída mirando al hermoso cielo azul lleno de nubes, el conejo se detuvo y por suerte no me caí. El conejo me envió otro mensaje mentalmente "Joven, hasta aquí llegó yo, ahora deberás recorrer este camino por tu cuenta". Lo miré extrañada y le pregunté la razón por la cual me abandonaba de tal forma digna de película, siendo su respuesta "Le tengo miedo al agua". No comprendí su razón hasta que miré al frente y vi un hermoso paisaje integrado por un pequeño lago frente a una isla de piedra con árboles.

Le agradecí al conejo y le di un abrazo. Él se fue saltando como si nada hubiese pasado y yo empecé a caminar hacia la isla de piedra, pero en un momento me detuve a admirarla, ya que era realmente hermosa y me daba una inmensa paz.

En tal momento anhelada tener una cámara fotografica para guardar tal imagen para siempre, pero solo tenía a mis ojos. Cuando empecé a caminar hacia la isla y toqué el agua del lago, desperté del sueño. Enseguida corrí hacia mi escritorio y escribí lo que recordaba del sueño, en especial el paisaje maravilloso del final, siendo éste el protagonista de mi obra artística.