56° CONCURSO DE REDACCIÓN DE HISTORIAS. / ¡Desmayada!

Gloria y Jorge son una pareja que se encuentran en retiro; tienen una hija, Sara, quien trabaja y estudia, y vive con ellos. Cada mañana, Sara atraviesa el parque de la ciudad para ir a su trabajo, y al llegar, los llama. Un día, Sara tardó más de lo habitual en llamar. Sus padres la llamaron para saber si estaba bien, pero no contestaba su teléfono; repicaba hasta que se cortaba la llamada. Empezaron a hacer conjeturas: 'Seguro se le descargó el teléfono y no nos pudo llamar', dijo Jorge sin querer preocupar a su esposa.

Una y otra vez trataron de localizarla. Una vecina los vio en el porche, un poco angustiados. Se acercó y les preguntó qué pasaba, y le contaron. La vecina dijo que tenía que ir cerca del trabajo de Sara y que al hablar con ella les llamaría. Caminó por el parque hasta que notó a un grupo de personas reunidas; se acercó y su sorpresa fue que vio a Sara en el suelo, desmayada. ¿Pero qué...?

Justo estaba un poco alejada del resto, así que grita la vecina Joana y las demás personas se acercan. Uno de ellos dice: 'Yo soy enfermero', así que la revisa y descubre algo al oler su aliento y ver el pañuelo en el suelo. Esto los pone en alerta, y llaman a los servicios de emergencia. Se la llevan y no logran despertarla. La policía se da cuenta de que alguien anda buscando secuestrar mujeres en la zona, así que inician una investigación.

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Revisan las cámaras de la zona, pero la capucha no deja ver bien quién es. Se van en un auto, así que buscan ese auto y lo encuentran tirado en una zona con restos de material de secuestro. En esto, Sara despierta y poco a poco recupera la compostura. La policía la interroga, pero no recuerda nada; parece que el trauma le hizo perder la memoria.

Al tiempo, Sara sale del hospital y poco a poco vuelve a su rutina. Así pasan los meses hasta que el secuestrador aparece y la secuestra de nuevo. Se la lleva, le tapa los ojos y la boca para que no pueda gritar, y llama al padre diciendo: 'Pensabas que me podías estafar en millones y que no iba a ser nada estafados, ladrón. Investigé mucho tiempo y te logré encontrar. Sé que la justicia no actúa ante los estafadores. Toma lo más valioso que tenías; ahora nunca más la vas a volver a ver'.

Jorge se vuelve loco y, sin avisar a la policía por miedo a que descubran sus fraudes, busca entre los estafados. Encuentra a cientos y poco a poco los va investigando con la ayuda de policías retirados. Las pistas apuntan a Julián, que es el que más plata estafó. Así que lo buscan financieramente, encuentran el lugar donde lo secuestró, y le pone un cuchillo en el cuello diciendo: 'Aquí morimos todos ahora'.

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En ese momento, un policía escondido lo mata. Julián cae muerto, y rescatan a su hija, saliendo del lugar. Entierran al secuestrador, y la familia vuelve a la normalidad y a la felicidad de volver a ver a su hija.