¡Saludos amigos de Scouts! En esta oportunidad dedicaré mi participación al concurso de redacción de historias “¿Falsa Alarma?”, propuesto por el compañero @fjjrg.

Imagen editada en Canva

La alarma del banco se encendió de forma repentina, las puertas de seguridad se cierran herméticamente, todos quedan atrapados dentro del Banco. Se escuchan sirenas que se acercan desde varias direcciones, policías se colocan en las inmediaciones y l agente corre por toda la calle alejándose del lugar, mientras que algunos curiosos se aglomeran grabando con sus teléfonos celulares.

Los clientes gritan asustados ya que no saben que ocurre, la gerente del Banco les dice que se calmen, que es una falsa alarma, que no hay ningún robo, que en cuestión de minutos la alarma se apagará y el sistema abrirá las puertas. Steven, uno de los clientes que acudió al Banco esa mañana, siente que algo no está bien, su experiencia de 30 años como detective le decía que algo pasaba…

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A las afueras del banco, entretanto, se escuchaban las sirenas de las patrullas y los gritos de los funcionarios, los cuales esperaban instrucciones de sus superiores para ingresar al edificio.

Los clientes, en estado de pánico, intentaron salir corriendo de las instalaciones, desconociendo que las puertas no abrirían, deteniéndose abruptamente por el fuerte estruendo de un disparo, proveniente a sus espaldas.

Steven, quién se mantuvo sentado analizando la situación, pudo observar a un grupo de sujetos encapuchados saliendo de las bóvedas del banco, fuertemente armados y llevando bolsos grandes. Su primer instinto le dijo que sacara su arma de fuego (un regalo del cuerpo policial para el cual laboró y dónde se retiró) y se enfrentara a los maleantes, pero pudo contenerse y con paciencia, pensar mejor sus movimientos.

Uno de los delincuentes indicó a gritos que nadie se moviera o procedería a asesinar a cada uno de los presentes y con un parlante aseveró a los policías: "Si intentan entrar a la fuerza, nadie quedará vivo”

Atacado por la ansiedad y los nervios y ya debilitado por su enfermedad coronaria, necesitó de varios minutos para calmar un leve dolor en el pecho que le inició al escuchar el disparo. El motivo de su visita al banco: solicitar un préstamo para ser operado a corazón abierto.

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Los minutos pasaban y las negociaciones no avanzaban, hasta que uno de los delincuentes exigió un carro, sin que fuese seguido por los policías, amenazando con poner una bomba en el sitio tras cortar la fuente de electricidad del banco y dañar todas las cámaras de seguridad.

Ante la peligrosidad de la situación, a los policías no les quedó mas remedio que ceder ante las exigencias de los maleantes, los cuales se retiraron del lugar con dos rehenes y dejando a Steven amarrado y golpeado en una oficina aparte, tras descubrir que tenía consigo una pistola, siendo liberado por los oficiales tras su ingreso al edificio, pudiendo todos irse del lugar.

Al llegar a su hogar, Steven no solo tenía muchos moretones en su cuerpo, sino que también tenía en su morral varias pacas de billetes de 100$. El motivo? Participó en el hecho. Steven planeó durante meses el asalto al banco de la ciudad tras no recibir el crédito que necesitaba para ser operado. Sus amigos, todos policías retirados y descontentos por la pobreza en la que vivían y la pobre pensión que cobraban, decidieron apoyarlo e intentar hacerse con el dinero de las bóvedas.

El plan salió a la perfección. Uno de los implicados y compañero de los ex-policias trabajaba como seguridad en el banco, por lo cual dejó una puerta trasera sin seguro, a sabiendas de que el pasillo no tenía cámaras de seguridad.

El resto de los integrantes del robo pudieron cambiar de vehículo en un túnel, dónde les esperaban en un autobús, detonando el que les había entregado la policía, bloqueando así el paso y borrando todo rastro de evidencia.

De esta manera finalizo mi participación, no sin antes invitar a mis compañeros @marvinvelasquez, @cruzamilcar63 y @soywilfredg a participar a través del siguiente Enlace. Muchas gracias a todos por leerme. ¡Saludos y Bendiciones!

Hasta la próxima