Hola mi querida haz compartido una gran historia, muchas veces las personas juzgan a sus semejantes sin antes conocerlos bien y se dejan llevar por la primera impresión tal como le sucedió al rey que no valoro la bondad y generosidad interior de su hijo, y simplemente lo desterró sin antes conocerlo, y esa es la moraleja que nos enseña tu historia, las personas muchas veces pueden ser hasta más despiadadas que el mismo demonio, mucha suerte en el concurso