Caminando por el sendero, el recorrido lleno de árboles que me brinda sombra por el intenso sol de la mañana, voy llegando a la valla que protege la casa del ganado, en un sitio se encuentra una madera en forma de letra "Y" es la entrada al patio de mi casa soñada, el olor a tierra húmeda invade mi olfato, mi corazón sobresalta por que nuevamente llegue al hogar de mis sueños, la casa de mis tíos de patios grandes y lisos tan bien mantenidos que ni polvo se le veían, de techos en dos caídas altos, piso de tierra bien curada para que no hubiera polvo. Las paredes de bahareque en algunos lados se notaban la madera y una que otras ramas que sujetan el adobon, su olor penetrante da la impresión de un invierno perenne. Sus dormitorios oscuros solo se ve en una esquina una pequeña ventana que por el día se puede ver casi todo y por la noche una vela nos acompaña en los ratos donde compartimos las vivencias del día. Su recibo pequeño solo con una mesa larga dónde nos reuniamos a degustar las deliciosas comida que nos traían de la cocina que se encuentra del lado afuera de la casa, un olor a humo inconfundible, aroma de campo, una sazón nunca más percibida, un amor familiar sereno, una rica leche tibia o un delicioso café al lado de un desayuno campestre, y el oportuno comentario de la tía Fabriciana "Espero que les guste" rutina que nos llenaba de una sensación de paz, tranquilidad al poder disfrutar de la vida en aquel hogar de camino angosto con una vaya que impedía el paso del ganado.

Invito a @yri02 para que participe en este interesante concurso.