Hallar a Ryan, en pleno combate, era sumamente arriesgado, pues el Capitán Miller designado para cumplir las órdenes de sus superiores debía, junto a siete militares más, ingresar a una zona llena de alemanes, lo cual significaba "ser carne de cañón". En medio de la búsqueda del soldado Ryan hubo tres confusiones que llevan al espectador al límite de los nervios, ya que en ocasiones se le creyó muerto, con lo cual la misión no se habría cumplido como se esperaba. Por fortuna, el soldado Ryan puede regresar a casa vivo, pero el Capitán Miller fallece.

Este final es conmovedor, porque el mensaje de la película es claro: Una madre no es capaz de soportar ver morir a todos sus hijos en una guerra. Por ello había que luchar por la vida del que no se hallaba. La pregunta es: ¿Puede un hijo vivo atenuar el dolor de una madre que ha perdido a tres en combate? Creo que no. Si para algo sirven las guerras es para causar dolor en los hogares, un dolor que solo se apaga con la muerte misma.

Me permito volver al caso de mi mamá. Mi mamá se hizo madre cuando apenas tenía 15 años. Tuvo una hija, y luego vinieron cinco varones.Cuando tenía 26 años debía criar a seis hijos sola, porque los padres de mis hermanos no se hicieron responsables de estos.

Cuando mis hermanos se hicieron adolescentes, a mi mamá le costaba controlarlos, pues mostraban su rebeldía como lobos hambrientos. Mamá cuenta que pasaban todo el día discutiendo entre ellos. Fue así como optó por mandarlos al servicio militar. En Carúpano a este centro se le conoce como CAIM (Centro de Adiestramiento de la Infantería de Marina).

Si algo caracterizaba y aún caracteriza a este cuartel es la severidad con la que controlan a los jóvenes soldados. El primero de mis hermanos en asistir a este centro fue Héctor, el mayor, quien luego de hacer su servicio militar de dos años decidió quedarse para hacerse Maestre de la Marina, y mi mamá estaba muy orgullosa de él. Luego vinieron los demás: Jesús, Freddy, Féliz y Carlos.

Freddy también decidió quedarse en el ejército para hacer carrera militar. Luego "introdujo la baja". y se retiró d elos cuarteles. En cambio, mi hermano Héctor se jubiló con el más alto rango al que podía llegar.

Como pueden ver, el ejército se convirtió en la tabla de salvación de mi mamá para controlar el ímpetu de mis hermanos. Pero no me hubiese imaginado la reacción d emamá si a alguno de mis hermanos les hubiese ocurrido lo mismo que a los hermanos Niland. Seguro que mamá no habría soportado tanto dolor.

Ser soldado es una carrera de riesgos. Entrar a ella es caminar en una cuerda floja. Por eso admiro a estas personas que son capaces de dar sus vidas para defender ideologías que quizás no compartan. Así que, vaya hacia los soldados, todo mi respeto y consideración.

Espero que les haya gustado mi post, invito a @marcybetancourt, @adeljose y @tocho2. Aquí la información