Saludos a toda esta prestigiosa comunidad, hoy tengo el gran placer y oportunidad de realizar por primera vez acá una de mis publicaciones, y eso es gracias a mi hermana @solperez que me dijo como suscribirme ya que no me salía la opción de hacerlo.

Esta publicación se trata de mi nieta, Luana Alexandra quién vive en Colombia y hacen ya tres años que no la veo. Cuando ella nació sentí en mi pecho y en mi corazón un amor muy diferente a los demás, sentí tanta ternura que no quería que nadie la tocara, ni siquiera su mamá, jajajajaja, ¿ qué cosas no?

Hoy mi nieta tiene cinco años, es muy extrovertida, además de cariñosa y habladora, le gusta dibujar, asistir al estudio e ir a la iglesia con la abuela paterna, pues yo soy su abuela materna. Cuando hablamos por vídeo llamadas no quisiéramos terminar nunca, sentimos al despedirnos que nos falta algo.

Cuando la miré sentí que Dios ponía en mis manos un pedacito de ese cielo maravilloso creado por él, ese firmamento que nos cubre con colores al atardecer y al repuntar el alba, muchas veces se torna oscuro como la noche y eso pasa cuando se acerca una tormenta, así muchas veces me siento yo cuando no puedo hablar con ella, la extraño tanto, que le pido a Dios poder tener alas y volar a su lado, sentir sus abrazos y besos.

Hoy me dice que amaneció un poco lluvioso y tiene que estar bien abrigada y usar tapa boca porque hay mucha gripe en el ambiente y por normas del colegio debe ir protegida.

Ella para mí es ese pedacito de cielo en mis manos, y hoy la extraño más que nunca. Esta es mi publicación por el día de hoy espero tener la dicha de seguir haciéndolo acá, las imágenes fueron enviadas por su abuela y la de la vídeo llamada fue capturada con mi celular Redmi A09. De ante mano gracias por pasar y leer.