Llegue a sentir celos cuando se ausentaba para asistir a una festividad con el personal que trabajaba en la oficina, recuerdo que no faltaba a la celebración del día de la secretaria y llegaba muy tarde en la noche y era muy solicitado, primero por el carro, que constituía el transporte por excelencia para trasladar a las damas y llevarlas a su lugar de residencia.

Y me imagino que tu como siempre mi bella amiga, ecuánime, asertiva y muy centrada; sabias manejar la situación aunque te diera rabia, se que ha tenido que ser muy difícil porque la verdad, la situación se tornaba como un poco abusiva; sin embargo, no dudo que mas de un pase de palabras tuvieron al respecto, aunque tus celos no estaban del todo infundados porque no querías abusaran de la nobleza de tu esposo. Te apuesto a que nadie aporto para el carro dañado jejeje. Estupenda entrada, sabia que la harías, por ello te invite. Abrazos y Bendiciones!