Ana Sofía, nació en Nirgua, Estado Yaracuy, zona centro-norte de Venezuela. A la edad de doce años, su mamá la envía a Caracas con una amiga que le había conseguido ocupación en una casa de familia para que trabajara allí. Esto era algo que solía hacerse con frecuencia debido a la precaria situación económica que se vivía. Ahora me imagino cuánto dolor habrá podido pasar mi abuela que tuvo que ver partir a su hija, en momentos donde la forma de comunicación era a través de cartas, o cuando alguien volviera y “trajera razón" de las personas que partían. Mi abuela no sabía leer ni escribir, mi mamá solo estudió hasta segundo grado.

_{Mi madre a sus veinte años.}

Fue muy difícil para ella adaptarse a los modos de vida caraqueños, solía contarnos el trabajo que pasó con la comida, por ejemplo, porque su dieta consistía en: arroz, yuca, caraotas, quinchonchos y topocho, y en Caracas, en las casas donde le tocó trabajar la comida era muy diferente; pero aprendió a comer y también a cocinar deliciosos platos.

Mi madre nació en el año 1934, quiere decir que en los años 1946 comenzó a vivir en Caracas y cuando fue una señorita con 16 años comenzaron a darle permiso para salir los domingos con las amigas, que trabajaban en otras casas como servicio doméstico. Recibió buena educación, aprendió varios oficios del hogar. Cuando salían iban a misa, luego a las plazas y alguna vez visitó la Radio que comenzaba a funcionar. Recuerdo que nos contaba a mi hermana y a mí cómo eran esas salidas y la riguridad del horario y la hora exacta donde debían estar nuevamente en la casa que la tenía concertada.

Una de las actividades que solía hacer como joven en ese momento era tomarse fotografías, tengo muchas de ella tipo carnet o completas, que las conservamos con cariño, donde se puede observar su belleza, mi madre fue una mujer muy linda.

_{Mi madre a sus dieciseis años.}

A la edad de 21 años conoció a mi papá, un hombre de 37 años, para ese momento, que trabajaba como contador en una oficina de policía, un andino de San Cristóbal, hijo único y un con carácter fuerte. Se casaron en Caracas ese año y el año siguiente nací yo, que soy la mayor de dos hermanas: solo dos hijas, mi padre quería un hijo varón, pero como no llegó, dijo que así estaría bien y no tuvieron más. Cuando nací entonaba una enfermera una canción del Indio Araucano, "Regalo de amor", ella así lo sintió y así me lo hizo saber.

Ella se dedicó a los oficios del hogar, mi padre era quien trabajaba en la calle, hasta que yo tuve también doce años y este comenzó a tener problemas de salud y ella decidió salir a trabajar. Antes había hecho arepas para la venta, con maíz que sancochaba y llevaba a moler cada mañana, pero luego surgió la harina precocida P.A.N y comenzó a hacerlas con ese producto, (que ahora es cotizado) pero la gente no aceptaba ese nuevo sabor. Entonces comenzó a trabajar lavando y planchando ropa ajena en las casas donde la solicitaban.

De esa manera logró que sus dos hijas sacaran sus profesiones: en mi caso, profesora de Castellano y Literatura y mi hermana, licenciada en Contaduría Pública. Escribir acerca de mi madre es un acto que desgarra; mi madre fue un ser humano con grandes dones, sus sabias palabras se convirtieron en mi muralla, debo decir porque así lo reconozco que todo lo que hice en mi vida hasta el momento de su muerte fue para ella. Estudié para ella, me formé para ella, mantuve mi primer hogar para ella. Fue después de su partida que comencé a verme a mí y comencé a vivir para mí. No sé si esto se entienda.

_{En sus cincuenta años.}

Fue tal su entrega a sus dos hijas, su esmero y dedicación para que estudiáramos, que aún hoy en día, su palabra sigue intacta y es la que le repito a mis hijas, como un legado de valores y buenas costumbres. Mi madre fue una mujer educada, responsable, que asumió su vida y sus recuerdos con mucha nobleza. Sus hijas no pasarían los trabajos que ella pasó y se entregó a eso. Su relación con su madre y el resto de sus hermanas fue de mucho respeto y consideración. Admiraba a sus hermanos y así nos lo hizo sentir siempre. Ella era la hermana mayor y la tercera de siete hermanos, cuatro hembras y tres varones, de los cuales quedan solo dos.

_{En mi acto de grado en 1981,}

Tiene mi familia materna el estoicismo como fórmula de vida, después de los cincuenta años comenzó a sufrir algunas dolencias que fueron tratadas en su momento. Nunca se quejó de sus males, los afrontó con temple. Se enfermó del hígado, cirrosis hepática, a pesar de que no ingería bebidas alcohólicas ni lo había hecho en su juventud, al parecer alguna hepatitis mal curada que dejó sus secuelas.

Mantuve con mi madre una relación armónica, conversábamos mucho. Todavía los domingos, que era los días cuando solía mantener largas llamadas telefónicas con ella, un celaje me llega y al instante la constación de que no es posible ya; cuando algo ocurre en la familia de igual manera la idea vaga de que tengo que contarle se atraviesa. No hay día que no la recuerde o evoque con alguna anécdota.

_{Con mi hija @nakary, recién nacida. Año 1992 en San Fernando de Apure.}

Ella tenía buen humor, le gustaba la música, y su repertorio de recuerdos surgían ante cualquier circunstacia. Yo estaba a cinco horas de distancia y viajaba con frecuencia a verla, igual venía ella a visitarme. Estuvo conmigo en todos los nacimientos de mis cuatro hijos. A finales del año 1998, vino con mi hermana a pasar las navidades conmigo, como todos los últimos años. Ese 31 de diciembre se complicó su salud, hubo que internarla y el 9 de enero de 1999 nos dejó.

Ahora sigue con nosotros siendo esa luz que guía nuestras decisiones. Está presente el día del Espíritu de la Navidad, porque recordamos su iniciativa para que lo festejáramos; en la cena del 24 de diciembre con su agradecimiento a Dios y solo pidiendo salud, el 31 de diciembre en ese último abrazo, en el arte culinario de mi hija @lilianajimenez quien sacó de ella su sazón y la dedicación en la preparación de alimentos y en mi fisonomía porque me sigo pareciendo a ella cada día que pasa.

Hasta aquí este homenaje al ser que me trajo al mundo, gracias a un concurso al cual invita: aquí.

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Contenido original
Imágenes de archivo en albumes personales, a las que le tomé fotografías con mi teléfono para este concurso.

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