Saludos a todos, compañeros de Steem for betterlife.

A continuación les dejo mi participación en el Concurso | Hora de ser creativo: una carta de amor a través del tiempo, que ha organizado el amigo @damithudaya en esta comunidad.

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Zafrinchen, en Pixabay

Mi divina caracola

"Ahora soy un anciano. Sabes que 80 años es mucho. Mientras me siento en mi escritorio y cierro los ojos, los recuerdos de mi querida esposa vuelven a mi mente. Han pasado 10 años desde que falleció. Crecimos juntos en el mismo vecindario, fue a la misma escuela y se enamoró a una edad temprana. Sabes, 50 años de amarse y cuidarse es mucho y atesoro cada momento como ayer.

Tomo mi bolígrafo y empiezo a escribir algo para ella. Quiero que sepa que mi amor por ella nunca morirá y espero volver a estar juntos en el cielo".

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Querida mía, te escribo esta carta frente al mar inmenso de tu recuerdo. ¿Sabes, amada mía? Hoy me escabullí del hospicio donde me he pasado los últimos años consumiendo mi insondable tristeza, donde he estado royendo la amargura como consuelo, donde hasta hoy sobreviví la locura de este mundo sin ti.

Luego de medio siglo en el que compartimos juntos cada respiración, amada mía, y de estos diez años que han transcurrido después de tu partida, todavía mi mente cansada recuerda con claridad que nos escapábamos aquellas tardes del colegio y nos veníamos a esta playa sagrada a caminar por la orilla del mar nuestro que nos bañaba los pies con sus olas leves, a veces, a veces, tormentosas, mientras veíamos pasar con las manos agarradas las horas volando como gaviotas.

Aunque entonces no lo sabíamos, mi divina caracola, éramos dos adolescentes con almas de niños todavía que se habían encontrado por los designios del destino para amarse más allá del tiempo y del espacio, para amarse más allá de la vida y de la muerte.

¿Sabes, esposa mía?, después de tu partida yo salí a buscarte sin rumbo. Anduve por el mundo como si fuera el infierno. Vagué entre las sombras humanas. Me perdí en los escabrosos acantilados de la mente adonde acudía con ilusión solo para escuchar el replicar del eco cada vez que gritaba tu nombre.

Un día cualquiera, luego de tanto peregrinar sin descanso mis viejos huesos vinieron a dar al hospicio donde los cuidadores y los otros residentes me llaman "El loco poeta", porque me paso todos los días escribiéndote interminables cartas de amor. Cada mañana me despierta tu memoria y siento fluir tu sangre dentro de mi sangre. Cada noche siento tus manos sobre mis párpados y sobre mis sienes y (aún dormido) lloro en silencio.

Pero ahora estoy aquí, mi divina caracola, esperándote frente al mar nuestro. Entre los colores y reflejos del último crepúsculo veo aproximarse el barco que luce como mascarón de proa una calavera. Ahora el tiempo se detiene en la playa donde tú y yo solíamos jugar. Te veo descender de la nave y entrar en las aguas que disipan mi nostalgia. Tú me tiendes las manos y "El loco poeta" escucha un enloquecedor rebullicio de aves. Esta noche volvemos a dormir juntos dentro del faro infinito que hace desaparecer el dolor de la ausencia.

_{Le envío una carta de invitación para este concurso a:
@evagavilan @mllg y @yurilaya}