Personalmente siempre me han encantado los gatos, me parecen tan tiernos y suaves, tan habilidosos e ingeniosos que los admiro bastante. Siempre he tenido gatos como mascota, conozco muy bien como se comportan y como generalmente son sus personalidades.

Los gatos suelen dormir 16 horas al día y generalmente están activos de noche, por mi parte acostumbro a dormir bastante (lo más que pueda si no tengo cosas por hacer) y curiosamente me desenvuelvo más en la noche y consigo ser más creativa en las madrugadas (como justo ahora que escribo este post, estuve todo el día pensando con que animal compararme y es a esta hora de la noche que por fin fluyen las ideas).

Los gatos son carnívoros y les gusta casar su propia comida, aunque a veces se acostumbran a la comida preparada y se vuelven muy gordos; yo creo que sería de ese tipo de gatos pues jamás podría ser vegetariana, me encanta la carne y sería muy raro que me pusiera a casar ratones, a demás del asco que les tengo.

Por otra parte los gatos son demasiados juguetones, ágiles y veloces, yo creo que omitiria la parte de ágiles y veloces porque no me considero tener estás características pero sí que soy muy juguetona, me gusta fastidiar a las personas hasta el punto en que terminamos jugando con las almohadas o intentando atraparnos por toda la casa (de pequeña jugaba así con mi hermano y mi papá, ahora a pesar de que tengo 23 años molesto a mis amigos para terminar jugando de esta manera, nadie puede controlarme jajaja).

Me gustaría ser un gato para escapar de noche en la madrugada y recorrer las calles sin miedo a nada, aunque me avergonzaría de tener que gritar en los techos de las casa cuando un gato intenté aparearse jajaja sería horrible.