Esta es la perrita de la fundación una Pastor Alemán llamada Kayla que paso por una tristeza después que estaba adaptada a sus dueños y ellos se tuvieron que ir pero ella quedó en buenas manos porque todos en la fundación la queremos mucho, al principio la tristeza no la dejaba comer y ella se había puesto flaca pero al recibir el amor de todos levantó su ánimo y ahora está mucho más repuesta y activa.

Es una perrita muy cariñosa y llena de amor pero cuando se pone brava sí que es fuerte pero es cuando no conoce a las personas, es una gran cuidadora y está pendiente de vigilar en la fundación. Les contaremos que a ella la presidenta de la fundación y su esposo la compraron y la perrita desde pequeña vivía feliz, acontece que cuando los dueños se van ella se pone triste y no comía, un día pasamos un susto la perrita se lanzó de la platabanda de la fundación, pensamos que se había muerto no queríamos ni verla pero gracias a Dios fue solo un susto, como todos en la comunidad estaban muy pendiente de ella y nos decían que se la regaláramos nosotros no queríamos porque se la vamos a entregar a sus dueños cuando vuelvan, un día robaron la fundación y la perrita estaba golpeada en todo su cuerpo como que le habían tirado piedra pero ella como que mordió a uno de los ladrones porque los padres vinieron a reclamar y así nos dimos cuenta que eran los niños que se metían a robar, desde esa vez nos llevamos a la perrita para la casa de la coordinadora y la curaron y cuando vamos a la fundación Kayla nos acompaña pero no se queda para proteger la fundación gracias a la plataforma pudimos arreglar la cerca y poner seguridad y Kayla pendiente siempre cuidando de uno.

Es la perrita mas hermosa, llena de entusiasmo, juguetona, le encanta correr y cuando uno la lleva a pasear ella es la que lleva a uno de lo rápida que es jajaja… La queremos y es un miembro fundamental de la fundación porque es parte de cada uno de nosotros.

_{Una perrita juguetona, amorosa, comelona y comparte mucho con los niños, Dios la puso en nuestro camino para cuidarla, fotografía tomada desde teléfono samsung core 2}

En ti, Señor, busco refugio; jamás permitas que me avergüencen; en tu justicia, líbrame. (Salmo 31:1)