Gracias a @crissanch por este maravilloso concurso. Aquí les comparto una salidita con la familia.

Desde que inicio la pandemia mi familia y yo muy poco hemos podido realizar las actividades que hacíamos anteriormente para dispersarnos, por lo que mi hijo de 5 años se aburre en gran manera, ya que es hijo único y además vivimos en un apartamento que carece de espacio externo para correr o jugar con libertad.

Por lo cual para la semana de flexibilización planificamos ir al zoológico de mi ciudad, el cual se encuentra algo decaído, con respecto a otros tiempos. Sin embargo, ver animales diferentes, siempre es entretenido.

Para esta salida invitamos a mi sobrina de también cinco años para que nos acompañara. Como debemos ser prudentes con nuestros gastos, preparamos toda la comida para llevar, entre ellas empanadas, torta, panquecas, galletas, sandwichs, jugo, y sobre todo mucha agua.

Ese día los niños se levantaron muy temprano, para arreglarse y tomar sus pequeñas maletas para partir. Llegamos al parque a las 9:00 am y el primero en recibirnos fue el Leon, el cual se encontraba posando sentado y un grupo de personas estaban grabando un video tocando piano cerca de este, nos imaginamos que se trataba de algo especial.

Luego caminamos, para ver un poco más hasta que llegamos a una mesa donde nos sentamos para tomar nuestro primer refrigerio, y seguir. Logramos ver, hipopótamos, la cebra, el rinoceronte, muchas clases de aves y monos, hasta que llegamos al sitio donde se encontraba el manatí, el cual no logramos ver por estar sumergido pero uno de los trabajadores del zoológico nos contó la historia de cómo estos habían llegado al sitio y había formado una familia, lo cual fue de impacto para los niños.

Luego avanzamos hasta los cocodrilos, osos búfalos tigres y Jaguar, todos los animales los logramos ver gracias a que como no habían muchos visitantes, estaban descansando tranquilamente en sus respectivas jaulas.

Queríamos ver el elefante, sin embargo al preguntar nos informaron que el mismo había fallecido por vejez, algo muy triste, ya que mi hijo ni mi sobrina nunca han visto alguno.

Finalmente tomamos nuestra segunda merienda frente a la laguna central del parque para partir de nuevo a la casa. Mi hijo y mi sobrina quedaron complacidos con el recorrido, tanto que duraron días hablando del león y el tigre que habían logrado ver, diciendo que cuando iríamos nuevamente a la selva.

Esperando que mis amigas @norma-lamae @rosanita, y @clavel se unan a este maravilloso concurso.