El reconciliarse con Dios siempre es bueno, mantiene el alma pura y sincera abriéndole los camino a quienes lo busca con el corazon suerte y gracias por la invitación
El reconciliarse con Dios siempre es bueno, mantiene el alma pura y sincera abriéndole los camino a quienes lo busca con el corazon suerte y gracias por la invitación