Para mí las relaciones son algo que no he desarrollado mucho a lo largo de mis cortos 24 años. Siempre he tenido pocos amigos desde que tengo uso de memoria y aunque eso no ha supuesto un mayor problema para mí, hubo un momento de mi vida en que quizá, me volví aún más desconfiado sin quererlo.

Si alguien me preguntara si tengo un mejor amigo, mi respuesta seria: no, no lo tengo. Esto es así porque hace mucho tiempo, entre los 13-14 años tuve una experiencia bastante decepcionante con la persona que consideraba mi mejor amigo. Esa persona con la cual anteriormente había estudiado y compartido mucho tiempo en mi infancia, me traiciono.

Eso me dolió muchísimo, en aquel momento ni siquiera supe cómo abordar aquella situación tan extraña, pero al final tuve que hacerlo, me puse una coraza que admito, no fue la más adecuada, pero con ello seguí adelante y solo después de mucho tiempo me percataría que ese no es el camino correcto.

Lo que ocurrió fue simple, mi amigo, la persona con la cual había compartido muchas cosas en mi infancia, robo un reloj de mi hermana mayor en una visita que ocurrió tiempo después de graduarnos de la escuela primaria. Llevábamos tiempo sin vernos y el decidió ir con otro compañero a visitarme para jugar con la consola de videojuegos y hablar un rato, lamentablemente esa visita termino en el robo de aquel reloj que mi hermana había comprado en uno de sus viajes y esto llevo a la ruptura de la amistad.