¡Mi vida es una Encrucijada!
Vivo una constante encrucijada,
dos, tres, cuatro o más caminos.
Qué difícil es sentirse así,
no saber cuál camino elegir o seguir.
EL corazón nos lleva qué camino seguir,
pero a veces el corazón se puede equivocar,
que regresamos de nuevo a la encrucijada.
A diario vivo una encrucijada,
que me deprime, me atormenta,
que me hace llorar en silencio,
ahogándome en mis lágrimas.
No saber que dar cuando no se tiene
y cuando se tiene no sabes que dar,
mi encrucijada es más por ellos,
que por mi misma,
ya que solo soy para ellos,
porque solo me tienen a mi.
Acostarte en las noches y no poder dormir,
pensando en cual camino seguirás en la mañana,
en la encrucijada de la vida.