Quien iba a pesar que esta gatita que recogí de la calle cuando estaba pequeña que la habían dejado en una caja por unos matorrales y al escuchar el miau, miau me acerque pensando que estaba en peligro y era que tenía hambre al llevarla a la casa tenía miedo de que se quedara ya que tenemos perros y colocaba las fotos en el whassatt para ver quien la adoptaba pero nada nadie quería adoptar a la gatita llamada Micha y a medida que paso el tiempo fue creciendo y convirtiéndose en una gatita más grande hasta que se convirtió en un miembro del grupo familiar haciendo feliz a mis sobrino y cazando los ratoncitos, siendo valiente y enfrentándose a los perros y hasta arepa come pues esta gatita se ha ganado el corazón de toda la familia y es parte de la familia y nos llena a veces de muchas alegrías, se puede decir que es hasta especial llena de mucho amor y cariño.