¡Ahh caray! Debe haber sido el loco, o quizá yo. Pero comprendo lo que me quieres decir, y lo asumo como una gran verdad.

Muy pocas personas saben que yo soy paciente diagnosticado con Depresión, a partir de mi batalla con el cáncer en el 2007, y el fallecimiento de mi hermano menor en 2024, a quien quise y sigo queriendo como a un hijo.

A veces no sabía cómo controlar mis estados de ánimo y emociones, y me provocaba llorar a cada rato, pero pocas personas lo notaron, porque siempre andaba con una sonrisa y bromeando. Poco a poco he ido saliendo de ese estado emocional, sin médicos tratantes, sin medicamentos ni terapias. Solo Dios me ha ido sanando, porque yo primero acepté mi realidad, y luego le entregué a él toda la carga de mi cruz, mientras comparto el peso de la cruz de él.

Estamos en contacto.

¡Saludos y éxitos!