Hay situaciones en la vida que no nos hacen felices sin embargo por comodidad, miedo, el qué dirán y un sinfín de motivos nos mantenemos allí en ese preciso lugar donde no somos realmente felices, sin saber que cada minuto vivido es importante y no vale la pena desperdiciarlo siendo infelices.

Hace algún tiempo viví una situación donde no era feliz: estaba en una relación sentimental con una persona que me trataba muy mal, existía el maltrato, la desconfianza el desinterés y la infidelidad.

Como ya venía de un fracaso anterior, pensé en quedarme en esa relación por el que dirán, que iba a pensar la gente de mi? Serian 2 fracasos, no mejor me quedo y aunque no era feliz permanecía allí.

así pasaron algunos años en ese dilema, viviendo una falsa felicidad.

Hasta que un día algo dentro de mi dijo¨: porque aguantar tanto si yo trabajo, gano mi propio sueldo, soy una persona luchadora y no dependo de la gente? Porque desperdiciar mi tiempo siendo infeliz si puedo y merezco algo mejor?

Así que un día enfrente mi situación y dije hasta aquí!

Hoy vivo feliz puedo decir que fue un verdadero alivio.

Aprendí a quererme a mi misma y entendí que no podemos adaptarnos a situaciones que nos hacen infelices por el hecho de que la gente nos puede criticar.

Basta con verte al espejo y amar lo que el refleja, si no aprendemos a amarnos como somos con nuestros defectos y virtudes nadie podrá amarnos y estaremos expuestos a situaciones llenas de infelicidad…

Por último recordemos siempre: cada día de vida es importante por lo tanto no podemos desperdiciarlo siendo infelices…