Agradezco a Dios en primer lugar por haberme permitido acumular durante mi trayectoria vital, importantes recuerdos que marcaron cada etapa de la educación y formación que he recibido hasta el presente. Hay una expresión muy bonita que dice: "Recordar es vivir" y es realmente, lo que este nuevo Concurso inspirado por nuestra amiga @nahela, nos permite traer a la memoria cuando tenemos que traer al presente "MEMORIAS COLEGIALES."

Viajar al pasado y detener la mente para traer recuerdos de mi Educación Primaria, Secundaria y Universitaria, no será nada tan fácil, porque aunque hay que recordar, también, hay que tener claro, que algunas lágrimas rodarán por las mejillas al traer al presente recuerdos buenos y negativos en cada una de mis etapas educativas.

Así que, agradezco a Dios y a toda la Comunidad Colombia-Original por este hermoso y maravilloso concurso de "RECUERDOS DEL COLEGIO". Gracias por su visita, lectura y comentarios. Feliz y bendecido día.

Con la memoria en blanco y la imaginación por crear, me dispongo a recordar algunos pasajes relevantes de mi vida en la educación primaria. Detrás de cada recuerdo, hay una mujer importante e inspiradora, que es la causa, la fuerza y el amor, de lo que soy en este momento. Ella es mi madre, que, aunque falleció hace un año, es la causa de muchos recuerdos preciosos en la escuela primaria. No fue fácil para mí adaptarme a la escuela en los dos primeros cursos de primaria. Recuerdo que, cuando estaba en segundo grado, la maestra se cansó de que me quejara tanto de mi falta de adaptación a la escuela. Un día, por el enfado, la maestra no pudo aguantar más y con la mano abierta me lanzó una feroz bofetada que me golpeó la cara. Fue una experiencia dura y desagradable que nunca conté a mis padres y a partir de ese momento, la bofetada me sirvió para empezar a entender la disciplina y la adaptación. Nunca más volví a llorar en la escuela por falta de adaptación.

Esta experiencia me ayudó a empezar a amar mis estudios. Recuerdo que los años siguientes en la escuela primaria, cada alumno tenía que hacerse una foto que le identificara como alumno de la escuela. Mi escuela primaria se llamaba "U.E Juan José Flores". La foto de 5º grado es una de las más recordadas, porque allí aprendí a valorar el trabajo de la maestra, de los amigos y el esfuerzo de mi madre.

En cuanto terminé el 5º curso de primaria, mi madre me animó y me dijo que pronto empezaría mi último año de primaria y que mi padre ya estaba haciendo los trámites para matricularme en el liceo. Todo esto me animó y mi madre me dio fuerza, cariño y amor. Se tenía que levantar de madrugada porque tenía que preparar el desayuno para 6 niños que estaban estudiando, unos en la escuela y otros en el liceo. Mi madre era muy trabajadora y siempre le gustaba que todos sus hijos fueran al colegio con la ropa limpia.

Comencé mi sexto grado y nos ordenaron tomarnos fotos individuales para identificarnos con el grado y la institución.

Así como había comenzado el sexto grado, yo también quería terminar rápidamente para recibir mi diploma y así comenzar una nueva etapa de educación en mi vida. Los días pasaron con alegría y mis padres siempre buscando las mejores condiciones para cada uno de sus hijos, aunque éramos una familia de muy escasos recursos económicos, la humildad y sencillez de mis padres inspiró a todos mis hermanos a avanzar en sus estudios.

Llegó el momento tan esperado y mi madre me acompañó a recibir mi diploma de sexto grado. Se hizo fotos conmigo y estaba muy contenta y se lo hizo saber a los vecinos del barrio donde vivíamos.

Llegaron los años gloriosos de una nueva etapa educativa. El que era apenas un niño, ahora comenzaba a experimentar cambios fisiológicos, porque empezaba a ser un adolescente en la nueva etapa de la educación secundaria. Terminé mis tres años de educación básica y pronto comencé la etapa diversificada de 4º y 5º año para lograr el título de bachiller.

Cuando llegó el momento de recibir el título de bachiller, los profesores organizaron unos ensayos previos para enseñarnos cómo teníamos que recibir el título de bachiller. Todas las secciones de 5º curso asistieron a los ensayos y, tres días antes de la ceremonia de graduación, recibí la noticia de que una compañera de mi sección había sufrido un accidente de vehículos y había perdido la vida. Todo esto marcó para siempre la vida de todos mis compañeros y de todas las secciones, tanto fue el impacto, que decidimos poner su nombre como el de la promoción. Esto impactó mi vida, porque precisamente, en uno de los ensayos previos a la ceremonia de graduación, ella se había sentado detrás del asiento donde yo estaba. El nombre de la mucha era Olivia Páez.

Llegó el día de recibir mi diploma de bachillerato y el ambiente en mi sección no era muy bueno, por lo que había pasado. Recuerdo que recibí mi diploma, simplemente lo compartí con mis padres y hermanos, pero no quise ir a la fiesta de graduación que la institución tenía para todos los graduados. Recibí mi título con gran sencillez.

Pronto mis padres consiguieron que me admitieran en la universidad. Mi madre siempre soñó con verme graduado con un título universitario y viviendo en una casa con mejores condiciones que la que teníamos en el barrio. Puedo decir humildemente que la casa del barrio donde vivíamos era una casita con paredes muy deterioradas y cuando llovía, el techo parecía una regadera, era de zinc, pero todo el techo estaba en mal estado. Mi madre me animó a estudiar en la universidad. Los momentos críticos en cuanto a finanzas, transporte y alimentación, marcaron esta nueva etapa de educación superior.

Con todos los esfuerzos y sacrificios realizados, pude llegar al último día de mi carrera universitaria con una gran victoria, al recibir mi título en Educación con especialidad en Matemáticas. Lo disfruté, lloré con mis padres y fue un momento inolvidable, cuando escuché mi nombre para recibir el título de Educación Superior.

Por último, quiero compartir en estas "Memorias de Colegio", que después de graduarme de la universidad, pude empezar a trabajar en la principal empresa de mi país, Venezuela, en Pdvsa y después de 2 años, adquirí un crédito de vivienda y me traje a mis padres al Oriente de mi país y les di las llaves de la casa que mi madre había soñado. Aunque mi madre está muerta, disfrutó 24 años en la casa que me había pedido que le diera. Por eso me gusta hablar de éxito, porque cada batalla de mi vida ha sido una victoria inspirada por mi madre y respaldada por el Dios Todopoderoso que creó los cielos y la tierra.

Las imágenes presentadas en esta publicación, aunque carecen de brillo y color, son de mi propiedad y pertenecen a mi archivo de recuerdos. Bendiciones a todos los parceros de Colombia-Original. Éxito.

Extiendo la invitación a @enivelo y @enderson49 para que se motiven y participen en este maravilloso concurso denominado: “RECUERDOS DEL COLEGIO”.