¿Qué pasaría si...?
¿Qué hubiera pasado si… Simón Bolívar no hubiese logrado liberar Bolivia, Colombia, Ecuador, Perú y Venezuela del dominio del Imperio Español? A partir de esta pregunta comienzan nuestras suposiciones, basándonos en algunos hechos reales...
Imagen diseñada en PowerPoint/ F/ F/ F
Por lo menos dos escenarios evidentes surgen de esta interrogante que se encuentra en los predios de las suposiciones: Si no hubiese sido Simón Bolívar, probablemente cualquier otro venezolano se hubiese destacado como el máximo líder de la extraordinaria aventura de independizar a estos países del imperio español; o pudo suceder, en cambio, que nada de eso hubiese pasado y fuésemos todavía un país dependiente, una colonia, del gobierno ibérico. Sin embargo, cuando examinamos los hechos con más atención, llegamos a la perpleja conclusión que, quizás, ninguna de estas dos premisas anteriores pudo ser posible.
Simón Bolívar/ F
Con respecto al primer caso, es bastante difícil encontrar en la historia universal una figura que se equipare con el generoso desprendimiento del Libertador por la quimérica patria que quería construir. Existen grandes conquistadores, magníficos estrategas militares, eminentes políticos, heroicos luchadores que se propusieron crear desmesurados imperios y un sinfín de individuos que, de una u otra manera, han dejado su nombre inscrito en la memoria eterna de la humanidad, pero casi todos se dedicaron a expandir sus dominios, a someter otras naciones a los lineamientos de sus ideales. Bolívar, en cambio, salió a luchar para libertar cinco países; no aspiraba a ningún privilegio, sino que renunció a las comodidades sociales y económicas que le proporcionaba su apellido para emancipar a estos pueblos.
Es por ello que nos parece bastante difícil que, de no ser el enjuto caraqueño quien se empecinó en cumplir con esta grandiosa gesta, hubiese aparecido desde cualquier rincón del continente un alma tan sacrificada como la suya.
Ante este panorama, el sentido común nos señala que fuésemos todavía una nación dependiente del gobierno español. La ausencia de un héroe empecinado como Simón José Antonio de la Santísima Trinidad nos hubiese confinado sin remedio a acatar las leyes y normas impuestas por esa nación europea.
El imperio español/ F
No obstante, debemos considerar que la corona española comenzó a perder su preeminencia desde principios del siglo XIX. Las colonias de América le habían proporcionado durante muchos años inmensas riquezas, pero el desorden administrativo, las luchas internas, la corrupción y sus enfrentamientos con otras potencias causaron una gran debacle en sus finanzas; tanto así que ya para 1898, una vez que pierde la guerra con Estados Unidos, renuncia a sus últimas colonias para decretar el final de su imperio.
Si para esa fecha, Venezuela y las demás naciones que se encontraban dentro del sueño unificador de Bolívar hubiesen formado parte del reino español, habrían quedado bajo la tutela de los Estados unidos, como ocurrió con Cuba, Puerto Rico y Filipinas; o se habrían vendido a la nación alemana, como fue el caso de otras posesiones ibéricas en Oceanía. Sin embargo, la proximidad geográfica con el país norteño sugiere que este no perdería la oportunidad de echar sus redes sobre las riquezas de estos países hispanoamericanos.
Dicho todo esto, lo que podemos deducir es que, si Simón Bolívar no hubiese logrado liberar Bolivia, Colombia, Ecuador, Perú y Venezuela del dominio del Imperio Español, la influencia de los Estados unidos, de todas maneras, hubiese llegado a estas tierras desde aquel entonces... como en efecto sucedió más tarde, pero valiéndose de otras circunstancias.
