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    Éfeso era la ciudad más prominente de Asia menor, ubicada geográficamente en la costa occidental, era un centro donde convergían los caminos por los que transitaban los viajeros provenientes de Oriente, Galacia y Mesopotamia y que se dirigían a Roma y España. Llegó a ser denominada: “La primera y mayor metrópolis de Asia” y “La Luz de Asia”; “La feria de las vanidades del mundo antiguo”.

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    Desde el punto de vista social y económico, Éfeso era una ciudad cosmopolita. Tenía una población conformada de diferentes habitantes de diferentes regiones del mundo romano de entonces. Era una ciudad rica por cuanto había mucho comercio y tráfico de mercaderías. A ella acudían turistas en busca de talismanes y recuerdos. Por eso surgió el próspero grupo de artesanos que fabricaban altares e imágenes plateadas de Diana de los Efesios.

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    Políticamente, la ciudad deseable, llegó a ser la capital de la provincia de Asia. El gobernador romano fijó su residencia allí. Era también una ciudad libre, es decir, se gobernaba a sí misma.

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    En cuanto a lo religioso; era Éfeso el centro de adoración de la diosa de la fertilidad conocida en la mitología griega con el nombre de Artemisa, y en la romana como Diana (Hechos 19:23-25). El templo donde se encontraba la estatua de ella era considerado una de las denominadas “siete maravillas de la antigüedad”. Ésta ciudad llegó a ser un centro importante de paganismo. Además el culto a Diana incluía una gran cantidad de sacerdotes y sacerdotisas.

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Éstas se dedicaban a la prostitución. El templo servía también como banco para los monarcas y comerciantes, así como también de asilo para los que huían después de cometer actos delictivos o criminales.

    La iglesia de Éfeso fue constituida muy probablemente por Aquila y Priscila aproximadamente en el año 52 d.C. cuando el Apóstol Pablo los dejó allí en su camino de regreso de Corinto a Antioquia de Siria (Hechos 18:18-22). En el siguiente viaje misionero, Pablo se quedó en Éfeso más de dos años (19:1-10) posteriormente, Timoteo se encargó del ministerio allí (1 Timoteo 1:3).

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Foco principal de transformación en Éfeso

    Dios dio vida, impartió salvación a los creyentes en Éfeso; muy a pesar de que antes vivían una vida desordenada conforme a las costumbres, prácticas religiosas paganas que hacía la separación de Dios. La transformación se genera a partir de que Dios obra maravillosamente haciendo milagros extraordinarios (Hechos 19:10) en un entorno donde lo común era ver milagros de manos de los hechiceros y brujos de la región: el espíritu de la potestad del aire, el mismo Satanás y sus demonios que obraban en la vida de todos los pobladores de ésa región; fue puesto en manifiesto el poder transformador en los creyentes del primer siglo en Éfeso, dando como resultados importantes la gran fogata de libros de magia de gran valor económico y el quiebre de los negocios de idolatría de los artesanos de la diosa Diana, causando un impacto muy grande en la economía y en el testimonio de un Cristo vivo, salvador, milagroso y transformador de todo aquel que le conoce y le busca de verdad.

DECLARACIÓN DE LA VISIÓN

    Llegar a ser una iglesia unida en la fe, la gracia y el conocimiento de Dios, al entender la obra salvífica de Jesucristo y su gran amor por toda la humanidad, haciéndonos coherederos y copartícipes de la promesa en Cristo, siendo salvos por su gracia creados para buenas obras, pertenecientes a la familia de Dios.

Video de Youtube que recrea la historia de Éfeso: