The Diary N° 145 de fecha 7 de agosto 2.021 / por @ sharifanamin/ LA COLA PARA VACUNARSE

Hola mi gente venezolana de esta gran comunidad, este es mi diario número 145 que inició a las 8 de la mañana con palabras de agradecimiento a Dios por permitirme despertar con vida y ver a mi familia con salud.

Nada es imposible para Dios.

Después del aseo personal, pase a la cocina a prepararme unos pastelitos con queso y tajadas, muy rapidito porque hoy es el día que tengo que vacunarme, el mensaje me llegó para esta fecha, es más yo creo que tenía que salir más temprano.

Cuando llegamos al IRDA, Una institución del estado donde actualmente se está colocando la vacuna en el estado aragua nos quedamos impresionados con la enorme cola que había en ese lugar yo creo que sin exagerar aproximadamente un kilómetro, allí me coloque en este sol inclemente.

Pero definitivamente, lo máximo que pude aguantar con ese Sol tan horrible fue 3 horas, la cola nada que avanzaba, le dije a mi esposo venimos otro día, no sé, si eso va incidir en la fecha, pero yo no aguanto el cansancio de estar parada aquí llevando sol tanto tiempo y seguimos el camino.

Si alguien leyó mi diario anterior, pues se dio cuenta que nos quedamos sin un caucho, porque se espicho regresando a casa, así que salimos En búsqueda de unos cauchos, ya los que estaban en uso no tenían vida, estaban en el alambre, nos pusimos a buscar ofertas en pocos lugares, por la situación de la gasolina y encontramos este lugar.

Entramos y mi esposo se puso a buscar entre los cauchos no uno nuevo pero sí con algún porcentaje de vida habló con el dueño del negocio y logramos conseguir cuatro cauchos a $20 cada uno.

Mientras colocaba en el caucho lo cual fue bastante tiempo me senté en unas de las sillas que estaba en ese lugar y allí esperamos aproximadamente una hora mientras colocaban los 4 cauchos.

Ya de regreso a casa el carro tenía un sonido extraño, mi esposo se paró en el camino para ver qué pasaba no vio nada anormal y seguimos.

Resulta que al mecánico se le olvidó sellar uno de los cauchos y los tornillos quedaron flojos, gracias a Dios, A quién pongo mi día a día todas las mañanas, no pasó nada.

Cuando íbamos llegando a la urbanización, uno de los vecinos nos dice, "cómo pudieron llegar con ese caucho tambaleando para todos los lados" y allí fue que de mi esposo entendió lo que estaba pasando.

Finalmente llegamos a casa bien a descansar dándole gracias a Dios por habernos cuidado en el camino eso fue todo por el diario de hoy nos veremos en el próximo si Dios así lo quiere.

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"En Dios haremos Proezas"

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Todas las imágenes fueron tomadas con mi Redmi 9A.