Saludos a la gran comunidad de Venezolanos Steem, es un buen momento para hacer un alto en las actividades cotidianas de todo el año y sumergirse en ese gran espacio sin fin de las festividades especiales y precisamente el carnaval es una de ellas. Este es una de las hermosas anécdotas en mi Pueblo Churuguara, una actividad familiar que desfiló por las calles, cantando, tocando nuestros instrumentos y alegrando la vida. Sobre todo emocionante para nuestros niños: Gregfran, Leonora, Valentina, Oriana, Oscarlys, Génesis, Rosita, Dianita y por supuesto nosotros, los adultos. Hicimos lo posible por hacer los disfraces en casa.

Y es que realmente una de las fiestas más esperadas y deseadas por nuestros niños y por muchos adultos también, es precisamente el carnaval, ese momento en el que las todos, niños, jóvenes y adultos pueden romper con lo establecido, vestirse de manera excéntrica, claro está de manera sana, construir su propio disfraz, participar de actividades divertidas tanto en el colegio como en las calles de la ciudad si hay desfile y disfrutar de una semana hermosa y diferente a las de todo del año.

Siempre el carnaval es una fiesta conjunta y familiar donde todos participamos pues es una celebración de adultos pero en niños y jóvenes también están presentes. Los disfraces permiten entrar en la sintonía de la fantasía, el desarrollo de los sueños, de la imaginación, de lo deseado, es una festividad que sirve mucho a los más pequeños, aquí pueden aprender a ordenar su mundo interior a partir de la representación de otros personajes y otros mundos.

La emoción de poder crear un disfraz o un objeto con elementos reciclados u objetos de casa es fabuloso; tanto pequeños y grandes aprenden a encontrar estrategias creativas para resolver sus ideas y necesidades y es que precisamente cuanto más raro te quede el disfraz, más emocionado se está en cuanto a imaginar, crear y elaborar la pieza, de modo que todos se sorprendan y se interesen en ese disfraz.

Tratar de crear o de elaborar nuestros propios disfraces no solo estimula la imaginación y la creatividad de los niños, sino que, además puede ser un excelente proyecto de familia. “El disfraz aporta en la medida que lo haces tú, ya que la creatividad está en el hecho de hacerlo, pensar la idea, comprar telas, cortarlas y crear el disfraz puede ser un súper proyecto, y compartir eso con toda la familia tiene un valor especial. Por eso el carnaval seguirá siendo un evento familiar y más aun en la familia Rivero, Saavedra, Flores…