Hoy vengo con mi participación a la dinámica realizada por nuestra amiga @genomil que nos invita a un debate libre sobre distintos temas cada semana, y el cual se me hizo muy interesante.

_{Imagen hecha por mi en Canvas}

El divorcio no debe ser algo malo.

Dependiendo de la situación familiar de cada quien un divorcio puede resultar en un suceso catastrófico o completamente pacífico. En mi experiencia, donde mis padres se divorciaron cuando yo tenía cuatro años y mi hermano diez, nos resultó totalmente normal. Mis padres tuvieron sus respectivos problemas, que los llevaron a decidir que lo mejor era quedar como amigos, pero esos problemas nunca los mostraron frente a nosotros; nunca fueron grandes discusiones, no hubo gritos ni mucho menos golpes, mantuvieron una relación muy bonita por aproximadamente diez años y a pesar del divorcio todo resultó bien. Aunque lamentablemente no todas las familias tienen una ruptura así de pacífica como fue en el caso de mis padres.

Aunque a veces he pensado que hubiera sido lindo que ambos siguieran juntos, de eso no haber ocurrido no tendría a mis hermanas por parte de padre, y muchas cosas serían diferentes al día de hoy, y estoy feliz con como es nuestra familia ahora.

Es triste y doloroso cuando un matrimonio termina, pero no tiene porque afectar a los hijos. Es mejor terminar las relaciones de forma sana y civilizada, y no mantener un matrimonio por el bien de los niños, porque a la larga, eso resulta peor que un divorcio. Muchos ven el divorcio como un hecho traumático para la infancia, pero no tiene que ser así si manejas las cosas correctamente.

Por el contrario, si la familia viene pasando por episodios de fuertes peleas, de golpes, insultos, claramente el ambiente es tóxico y una separación aunque sería lo mejor para las partes involucradas no resulta sencillo, porque uno de los dos quiere quedarse atado al otro, generando un círculo vicioso. En estos casos las familias necesitan buscar ayuda urgentemente, pero no evitar el divorcio inminente que debe de suceder.

Cuando las parejas logran atravesar todos los problemas juntos, de forma sana, y el amor sigue intacto, es precioso. Poder ver a una pareja casada y feliz por tantos años resulta inspirador e irreal, como un sueño que todos quisiéramos cumplir. Pero si esto no sucede, y al contrario la relación va llegando a su fin, luchen por su relación, pero no más de lo que pueden dar. No consuman todas sus fuerzas, aprendan a dejar ir cuando ya no hay nada que hacer, y corta las cosas antes de que sea peor; y de ser posible, terminen en buenos términos, queden como buenos amigos, no se vuelvan personas indiferentes el uno para el otro, no se olviden. Mejor intenten mantener una bonita amistad y guarden los recuerdos que tienen juntos con cariño. Y si atraviesan una situación difícil y delicada con su pareja que les hace difícil realizar el divorcio, pidan ayuda, no tengan miedo. El divorcio por muy doloroso que sea, puede ser un tormento para muchos y un alivio para otros.

Y eso ha sido todo por hoy, espero que les haya gustado mi opinión. Invito a @elvendork y @fjjrg a participar en esta dinámica, si lo desean, y a estar al tanto de los distintos temas que estén por venir.

¡Nos leemos!