PRIMER CONCURSO 300 PALABRAS | REFLEXIÓN | LA MÚSICA ES CONEXIÓN

Siempre que oigo música venezolana en especial, el cuatro; lo primero que viene a mi mente es mi papá Henry y mi perro Pomponio. No creo que pueda haber una persona más obsesiva con el cuatro que él. Ensaya hasta ocho horas diarias. Ama su instrumento, lo siente y lo vive. No lo toca por dinero, fama o ego. Lo hace por pasión, entrega y amor. Lo pule, lo limpia y lo cuida. En cuanto a Pomponio (que ya no está con nosotros) amaba el sonido del cuatro, un hecho tan extraño y gracioso. Difícil de olvidar.

Mi padre llegó hasta imponerme el cuatro, pero no pude con él, apenas podía con la guitarra acústica. Lo único que logré aprender fue el famoso “Dumbi, Dumbi”. Por otra parte, no todo es color de rosa, a mi papá se le ha dañado su cuatro y una vez hasta lo robaron, pero no se desanimó. Además, de cantante no se le da muy bien a él, pero lo intenta, es que cantar como el maestro Simón es muy difícil. Dejemos eso a Emilio Lovera.

Ahora, vivo en Santiago de Chile y no estoy con mi padre (está en Venezuela) y mi perro (aunque sigue en mí) se ha ido, la música venezolana, en especial, el cuatro me conecta a estos dos seres que tanto amo; mi papa tocando con el corazón el famoso pajarillo y mi perro alegre a su lado moviendo su colita. La música rompe barreras, a pesar de la distancia y la muerte, ella siempre está viva y nos evoca grandes recuerdos. Y como melomana certifico que la música es conexión.

Gracias al amigo @fjjrg

Muchas gracias mis chuppitos.

Con amor: @lachuppis