2º Concurso Literario Foto-Relato / Lluvia Dominguera
Esa tarde el platanal que separa la casa del corral se llenó de agua, al igual que la carretera; los sapitos hicieron acto de presencia y dejaron en los charcos sus huevos, una buena señal para los campesinos. Mientras tanto yo me disponía a buscar a Lucero mi yegua, una potra de muy buen andar, que se encontraba en el corral, junto a los becerritos de Paraulata y Pato Real ; la amarré, ensillé y nos dispusimos a salir a la sabana a recoger el ganado, amamanté, encerré los becerros, prendí el humo para la plaga, le coloque la sal y la melaza al resto del ganado, desensillé la yegua y me preparé para dormir, luego de un baño fortificante.
A la mañana siguiente, aun el corral y sus alrededores estaban repletos de agua y barro, puesto que en la noche continuó la lluvia; eso no me intimido, me puse mi traje, botas de plástico y a ordeñar entre canticos, hacer el queso, darle maíz a las gallinas, suero a los cochinos, su pedazo de carne a los perros y hacer unas deliciosas cachapas con el maíz que coseché en uno de los corrales. .
Hola, @ karols1. Tu historia excede en mucho la cantidad de palabras que se expresan en las reglas del concurso. Te sugiero que, si te parece, hagas los cambios necesarios para ajustar la extensión del relato.
Te saludo.
Gracias por la sugerencia. Ya realizo los cambios necesarios al relato para ajustarlo a las reglas.