Martes, 8 de junio, me tocó salir a hacer diligencias de papeles y uno descubre que mientras el tiempo transcurre velozmente, las gestiones para trámites de documentos parecen quedar detenidas en alguna burbuja del espacio-tiempo.

Me levanté temprano, con algo de ansiedad porque me tocaba retirar un documento en el registro, pero... ¡no estaba listo! Además me informaron que ya no atenderán los martes sino los miércoles y jueves. Bueno, al menos ahora son dos días de atención al ciudadano.

Pero antes de salir, tomé mi acostumbrado cafecito, un pan y un jugo de mango de mi propia cosecha. Para salir, es bueno desayunar antes, porque nunca se sabe a que hora se regresa.

Hoy regresé temprano, aunque sin mi esperado documento. Espero que la suerte me acompañe la próxima semana.
No cociné para el desayuno, así que llegué a preparar algo rápido y lo más rápido que se me ocurrió fue una tortilla. La hice grande para dividirla en dos: almuerzo y cena. Le agregué salchichas.
_{Almuerzo - cena, tortilla con salchichas}

Después de almorzar, un rato de reposo siempre viene bien. Esta vez no vi noticias. Escuché música de un "mix" que me dejaron grabado mis hijos. Me quedé dormido, cosa extraña en mí porque nunca duermo durante el día. Así que me di una ducha para despejarme y salí al huerto. Allí siempre hay quehacer. Por ejemplo, el riego es una actividad inter diaria, a menos que llueva.