Espero se encuentren todos bien. Hoy en la tarde, cuando salí de casa, al pisar en la acera de la entrada del edificio, sentí en crujir de las hojas, fue como un alerta para recordarme que debería tomar las fotos para presentar el post, cosa que hice inmediatamente, de regreso quizás tendría las manos ocupadas con cositas que a veces compro en el camino, si dejo las fotos para después, se me olvida porque la mayoría de las veces estoy despistada.

Es increíble como las hojas secas que muchas veces pisamos, no le damos importancia, sino para barrer porque afean nuestro jardín. Son de gran utilidad en el área de la botánica, en su proceso de descomposición, sus nutrientes son reabsorbidos por las raíces, siendo de vital importancia para el crecimiento y fortalecimiento de las plantas y sirven como manto protector para evitar la corrosión de la tierra.

En la urbanización donde vivo, hay sembrados muchos árboles de caoba, como todas las cosas tienen su parte positiva y la parte negativa, la parte negativa es que el año completo tenemos que estar barriendo los jardines y aceras, en primavera comienzan a soltar unas pequeñas flores de color amarillo que parecen una alfombra, luego llegan los frutos, que son grandes y empiezan a caer por todos lados, como los árboles son bastante altos, los frutos caen a una velocidad muy rápida y con fuerza, pueden malograr a cualquier persona, y en verano, caen a cada momento una lluvia de hojas secas que cubren el piso.

Estas fotos son de una pequeña área del estacionamiento, así pasa casi todo el año, lo positivo es que los frutos de este árbol, sueltan unas semilla, son medicinales, contienen fitocompuestos naturales antioxidantes, antiiflamatorios, antibacterianos, blanqueadores de la piel y cicatrizantes, también es recomendada para las personas diabéticas, regulan en azúcar en la sangre.

Por otro lado, tenemos la madera del árbol, es muy usada para trabajar la ebanistería elaborando lujosos juegos de dormitorios, mesas y sillas, lindas esculturas, así como también la fabricación de instrumentos musicales y tantas cosas buenas que ofrecen estos árboles.

En cierto momento, los vecinos lo queríamos cortar, pero ahora los veo como una bendición, todo el día disfruto del cantar de los pajaritos que posan sobre las ramas, los loros que llegan todas las tardes con su canto como si fuera una competencia haber cual canta más fuerte y las chicharras que en esta temporada me sorprenden que hasta en las madrugadas están cantando, o no les estaba prestando atención, lo cierto es que ahora adoro esos árboles y sus hojas secas.