El caudillo era vitoreado por sus éxitos en batalla y todos lo elogiaban, nadie se animaba a decirle nada porque tenía un carácter muy fuerte. Siempre se reunía con los señores del reino para jugar a las cartas y ahí hablaban de todo, ya que eran los más ricos y era una mesa tanto recreativa como de negocios en las más altas esferas del poder.

Llega un rumor al monarca de que lo quieren cambiar, derrocar, ya que algunos negocios se los está quedando para él y a los ricos no les agrada tal quita en sus arcas. Como todo gobierno, hacen cosas para desacreditarlo y crear un ambiente de rebelión y buscar un monarca más adaptable a las ganancias de los ricos y no propias a costa de los ricos. Así que empiezan a decir rumores de que el monarca habla con brujas y demonios, que se le ve hablando solo al aire. Esto empieza a calar y lo empiezan a tratar de loco.

Esto llega a los oídos del monarca y se juntan como siempre con los ricos. Su práctica con la espada se vio reflejada en que les cortó la cabeza de un solo golpe, así que cayeron las cabezas y después fueron a buscar a sus familias y sus bienes. Así que el monarca fue por todo, se quedó con el gobierno y con todo el dinero de la alta sociedad. Entonces puso gente de él en las distintas empresas y ya se había convertido en un gobierno exigente y malo.

Pasado el tiempo se dio cuenta de que los ricos no eran ricos porque sí, ellos sabían manejar la economía y dar valor al país. Y ahora la gente que el monarca puso no sabe generar riquezas, así que el pueblo cae en la pobreza extrema y ciego por el poder los mantiene así por mucho tiempo, matando con su poderosa espada a quien ose decir algo malo de él.

Así que tiene callado al pueblo en estado de rebelión silenciosa, pero la desesperación por la comida, gente pidiendo en todas las calles, la solidaridad de la gente es la que mantiene cierto orden, hasta que un día matan a un joven que era muy querido en el pueblo. Esto vuelve locos a la gente y salen a atacar al gobierno, ya no lo aguantan más, todo se vuelve una locura hasta que finalmente logran derrocarlo y lo cuelgan en la plaza pública. Así, poco a poco, la nación vuelve a ser más normal y esto que pasó les abre los ojos para nunca más dejar que un gobernante sea tan egoísta.