María y Carlos se enamoraron desde el primer momento que sus miradas se cruzaron, y desde ese entonces iniciaron una vida juntos, pasaron un poco más de una año de novios y finalmente se casaron.

Se mudaron a un pueblo costero pues Carlos era pescador y de esa manera mantendría el hogar. Tenían una casa modesta, pero muy hermosa, María estaba muy feliz y su felicidad se completó cuando se enteró que estaba embarazada.

Esa tarde se vistió con su mejor vestido pues iría al muelle a esperar a Carlos para darle la gran noticia que sería padre, pero llegaron todas las embarcaciones menos la de Carlos, estaba angustiada y no le quedó más remedio que regresar a casa.

Imagen tomada de la publicación de @solperez

A la mañana siguiente regresó al muelle y nadie sabía sobre Carlos, puso la denuncia en la guardia costera, pasaron varios días buscándolo en el mar, pero no había rastros de la embarcación ni de Carlos, María se sentía morir.

Pasaron los meses y María dio a luz a una hermosa niña a quien llamó Carlina en honor a su padre y todos los días visitaba el muelle y se sentaba con su hija en brazos a esperar y le hablaba de él con el amor de siempre.

Así pasaron los años y las idas al muelle se volvieron un ritual de madre e hija, nadie podía convencer a María que Carlos no regresaría, porque lo más probable es que haya muerto en alta mar, María no lo aceptaba y nunca permitió que ningún otro hombre la pretendiera, ella se dispuso a esperar a Carlos por siempre, si vas al muelle en las tardes seguramente la verás allí, en su eterna espera.

Esta es mi participación en la iniciativa de la amiga @solperez, quien nos invita a crear un escrito a partir de obras de arte, es muy bonito, anímate a participar, acá te dejo el enlace

Invito a la amiga @marito74 a que se anime a participar.

Gracias por leerme, te deseo salud y bienestar; además de éxito en todos tus proyectos de vida.

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