Venezuela Concurso - Semana 18 - Dedicatoria a mi padre.

Mi padre Argenis Lazarde, que en paz descanse, fue un gran ser humano. No tengo palabras para agradecer su sacrificio para sacar adelante a sus hijos y podernos dar educación y calidad de vida. Me lleno de orgullo hablar de mi super papá que además de velar por sus hijos, también lo hizo con sus padres y hermanos. Mi padre tuvo años trabajando en un campamento americano en Amacuro en el bajo Delta. Cruzaba en lancha el rio Orinoco y un sitio llamado: la barra, es decir a la desembocadura al mar. Siempre nos narraba que en sus travesías para llegar a Amacuro, corría riesgo de naufragar por las grandes olas. Con el tiempo se retiró y con el fruto de su trabajo compró un negocio y siempre que lo cerraba, le llevaba comida a los indígenas. Ellos adoraban a papá. Lo llamaban: "Argenis pan." Papa nos enseñó la bondad y la acción de dar. Trabajó duro junto a mamá vendiendo toda clase de comida. Era una persona super agradable y bien chistoso. Tenía como costumbre sentarse al frente de su casa y todas las personas que pasaban por allí lo saludaban con un apodo y mi padre también les respondía a todos con sus respectivos apodos. Mi papá fue muy conocido porque hasta el sacerdote de Barrancas del Orinoco le tenía gran aprecio y respeto. El sacerdote al casar a una de mis hermanas, resaltó el sacrificio de mi padre comentando que papá la había criado con mucho esfuerzo vendiendo pastelitos y empanadas. Mi papá siempre nos cuidó, amó y quiso a mi madre hasta el final de sus días. Ambos eran inseparables, no está demás decir, el dolor y el vacío que dejó su partida porque nos cambió la vida. Dios te tiene en un lugar precioso mi amado padre bondadoso❤️