La Pedofilia es una palabra fuerte que no sólo se basa en la atracción por personas con edades inferiores a la nuestra. Sino que va más allá, porque puede constituir una afección psicologíca que lleva hacer daño de diferente manera a esas personas.

Se han escuchado muchos casos a cerca de padres que violan a sus hijos, hermanos que atentan contra las hermanas. Pero creo que no hemos tratado de profundizar sobre el porque esto ocurre con regularidad en el grupo familiar o son las personas cercanas las que cometen estos actos en contra los menores a su alrededor.

Creo que esto ha existido desde tiempos remotos, donde mujeres tenían hijos a muy temprana edad, y se casaban con personas mayores, quizás nos sorprenderiamos si indagamos a que edad tuvieron nuestras abuelas sus primeros hijos o cuando comenzaron a tener relación con su pareja.

Así mismo, hay culturas que han practicado la Pedofilia y hacen está actividad parte de sus leyes como lo recientemente ocurrido en Irak el cual se legalizó el matrimonio con niñas de a partir de 9 años. Fuente

Por eso debemos preguntarnos que si atentar en contra la integridad, física, psicologíca y sexual de un menor, solo puede considerarse pedófilia o si este tipo de acciones escondidas detrás de leyes también son actos pedófilos disfrazados.

Las leyes establecen límites de edad para determinar si el acto entra entre los parámetros de la Pedofilia, pero qué ocurre cuando existen jóvenes de más o menos 18 años tanto hembras como varones que son abordados por adultos de más de 40 años con intenciones sexuales, esto no es considerado pedófilia. Entonces nos lleva a pensar que hay muchas interrogantes dentro de lo que debemos considerar pedófilia.

Estos actos actualmente ocurren de manera amplia porque la tecnología ha ayudado a diversificar el campo de acción de un pedófilo. Y son los niños y jóvenes quienes se exponen a este riesgo inminente en redes.

Los que tenemos hijos sabemos que el campo de protección se hace cada vez más difícil de cubrir, porque ya no es solo la televisión sino el internet, la telefonía móvil a la que se tiene acceso a temprana edad.

Decimos fácilmente que no debemos darle acceso a este tipo de tecnología a los niños. Pero que difícil se torna en una sociedad donde los padre debemos trabajar y ellos quedan solos en casa, al cuidado de desconocidos o simplemente con la posiblidad de salir a la calle. Y si les ocurre algo o se les presenta una dificultad y están incomunicados y entramos en el dilema de que les hacía falta tener un teléfono como comunicarse.

Creo que las campañas informativas que se realizan son buenas, pero también se debe tratar de orientar a los niños y jóvenes y enseñarles a identificar los señales de alerta. Porque no sólo la relación sexual obligada con menores es una forma de violación así que con solo decir que los pedófilos son los que violan niños nos quedamos cortos en esta definición. Y si vamos a castigar a estas personas no alcanzarían las cárceles para incluir a todos los que en algún momento han cometido pedófilia.

Aquí les dejo esta frase de mi autoría que surge porque de pequeña, los niños eramos felices en las fiestas con payasos, pero en ocasiones las risa eran fingida al sentir que esos payasos algunas veces nos acariciaban de manera extraña y cuando estabamos solos hablábamos de eso, pero no existía la confianza de manifestarlo a los demás.

Por eso hoy en día no me gusta la gente que oculta sus intenciones detrás de una máscara y una sonrisa fingida como la del payaso.