El tema que nos propone la amiga @genomil es, como siempre, de alto interés e importancia, no sólo por lo que el comportamiento del ciudadano peruano deja claro a nivel mundial, que para muchos puede pasar por "acaloradas" diferencias deportivas entre hinchas de dos equipos, sino por algo mucho más importante desde mi punto de vista, y es el desprecio de ciudadanos de un país en contra de otro, lo que deja al descubierto la insensatez y la falta de empatía que hoy se ha adueñado de las mentes de muchos que se han dejado llevar por información producida desde fuera y apoyada, en la mayoría de los casos, por los gobiernos de los diferentes países, entre ellos el de Perú. Tomo la oportunidad de invitar a @zorajaime y @quiaratiby

No podemos tapar el sol con un dedo. Todos sabemos, que al igual que salieron personas trabajadoras, con principios y valores familiares, interesadas en una potencial mejora económica para sus seres queridos también salieron personas de dudosa reputación quienes, sin lugar a dudas pudieron haber cometido fechorías. Sin embargo; a pesar de que las cosas buenas son muchas más que las malas, se le ha querido dar auge a través de los medios de comunicación nacional e internacional a aquellas que van en detrimento de nuestra gente, metiéndolos a todos en un mismo saco y de esa manera se juzga y condena a todos por igual.

A continuación quiero compartir con ustedes una especie de parábola interesante que encontré en internet.

Esta nos dice que si ponemos en un frasco 100 hormigas negras y 100 hormigas rojas, no pasa nada pero si alguien agita ese frasco, las hormigas rojas creerán que las negras son las culpables y las negras; que las las rojas los son, sin embargo el culpable es aquel que movió y agitó ese frasco. La parábola termina entonces con esta reflexión: De igual forma sucede en nuestra sociedad, antes de pelear, necesitamos parar y pensar, ¿quién agitó el frasco? , realmente ¿quién se beneficia de esta pelea?

En mi desempeño como docente, en varias ocasiones me tocó intervenir en acciones realizadas por muchachos mayores en contra de niños de grados inferiores, solo por capricho. Los alumnos de 2do y 3ro de educación secundaria ponían a pelear a dos niños de primaria, diciéndoles cosas a uno en contra del otro hasta que reaccionaran y se fueran a los golpes, solo porque si, porque ellos estaban aburridos y querían reírse un poco a costa del maltrato de dos criaturas mucho más pequeñas que ellos.

Una vez más nos toca reflexionar a todos por igual, no todo lo que dicen los medios de comunicación está a favor del ciudadano común y desgraciadamente, muchas veces nos encontramos en el lugar del conejillo de indias en este experimento llamado sociedad. Algunos aún Necesitan despertar el sentido común y hacer un ejercicio de empatía y entender que así como hubo un tiempo en el que ciudadanos de diferentes nacionalidades salieron de sus respectivos países, entre estos los que hoy nos vejan y acusan de todo lo que se les ocurre, para buscar mejoras encontrándolas aquí de manera tal que han permanecido y convertido a este país en su hogar permanente, hoy somos nosotros quienes necesitamos de esa misma hospitalidad, que esta situación no ha sido algo que se ha escogido a gusto ni mucho menos con ánimos de entorpecer la estabilidad económica del otro, sino por pura y simple necesidad.

Aún hoy, algunos necesitan entender que unidos somos más fuertes y mucho mejores seres humanos que estando separados actuando de forma mezquina.