Nuevo Concurso: Mi Ciudad Favorita / Maracay de Antaño y Moderna

Agradecido @raquelsiso1 por esta idea que me ha llevado a recuerdos maravillosos y a toda la comunidad #venezolanossteem mis bendiciones en @steemit.

Maracay de Antaño y Moderna

Yo nací en San Cristóbal, capital del estado Táchira, pero desde muy pequeño mi familia se mudó a la ciudad de Maracay, ahora vivo en otro municipio alejado de la capital aragüeña, pero conservó en mi memoria la ciudad de antaño, para ese entonces un pueblo lleno de haciendas, plazas, grandes árboles, arquitecturas modernas y un ferrocarril.

Como dice el escritor italiano, Italo Calvino: "Las ciudades como los sueños están hechas de deseos y temores..."

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En esa época, no hacía tanto frío como en los Andes, pero Maracay tenía un clima templado y la gente usaba paltós, sombreros, se abrigaban con vestimenta típica de ese entonces. Me gustó mucho el calor afectuoso de sus pobladores, había gente amable, como hoy, solo que el ritmo ha cambiado con la trasformación urbana como consecuencia del crecimiento demográfico y el desarrollo político como ciudad moderna.

Cuando visito el centro de Maracay, recorro sus calles y voy señalándole a mi hijo los sitios que ya no existen, o conservan parte de esa época, como en esta foto de abajo tomada en el mismo sentido que la anterior.

Foto tomada por mi nieto con su Teléfono a petición mía

También le cuento una que otra anécdota de muchacho cuando andaba por esos terrenos tumbando frutas, o en el mercado donde una vez me perdí y mi mamá me encontró durmiendo encima de unos sacos de arroz ¡ja, ja, ja!

En ese momento la actividad económica primordial era la agricultura y la cría de ganado, era un pueblo rural que fue floreciendo como centro de inversión durante el mandato de Juan Vicente Gómez que fijó su residencia en Maracay; por cierto, mi madre lo conoció, también al famoso coronel Eloy Tarazona, su asistente por llamarlo así; el benemérito era oriundo del Táchira, un hombre de carácter recio, caudillo para esos días, todos le tenían miedo.

En la foto que sigue Tarazona es el de la izquierda.

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A pesar de las contrariedades dictatoriales y su negocios particulares, Gómez mando a construir edificios, casa y otros locales necesarios para la vida cotidiana diseñados por destacados ingenieros y/o arquitectos que hoy en día existen un poco deteriorados, como: el Mercado Principal, para la distribución de alimentos a través de puestos de venta, el Hotel jardín que fue uno de los más modernos en el país donde ofrecían servicios de restaurante con exquisitos menús, lavandería y habitaciones, poseía salones de reuniones donde fui – posterior a su muerte- más de una vez a celebrar los carnavales; el Circo de Toros, el Teatro Maracay (Teatro Ateneo) y salas de cine, así como galleras para la recreación particular y pública; estas últimas no dejaron huella histórica.

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También surgió un ramo industrial, como Telares de Maracay hoy Centro Comercial la Estación, Aceites Maracay, Lactuario de Maracay que todavía existe cerca del terminal de pasajeros, plantas hidroeléctricas, entre otras.
La mantequilla de Lactuario, es riquísima, es costosa, la colocaban en los restaurantes en forma de cuadrito para untar con el pan
¿La recuerdan?

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En fin, surgió el proyecto “Ciudad Jardín” como una propuesta para “vivir la ciudad, para disfrutarla y donde el verde o pulmón vegetal es parte fundamental de sus diseños...”; así se inicia un proceso de modernización que fue creciendo con obras de infraestructura civil y militar, como el reconocido cuartel Sucre en la avenida Bolívar, al lado de la Plaza del mismo nombre, el cual fue declarado en 1994 patrimonio de la nación.

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Recuerdo que en Maracay funcionaba una filial de la Caribbean Petroleum y una bomba de gasolina, claro, había pocos habitantes, además solo algunos de ellos con vehículos.

Para mi paseo por las nubes que les ofrezco en este post, quiero hacer referencia a algo que nunca olvidaré: la Estación La Línea del Gran Ferrocarril de Venezuela, cuya ruta era Caracas-Valencia. Ir de viaje a la capital –ahora Caracas- era toda una odisea, podías rodar unas 4 o 5 horas en tren; la gente se montaba con gallinas, cochinos como en un autobús repleto, pero me divertía porque se detenía en los pueblos, recorría tramos con paisajes maravillosos hasta llegar a nuestro destino.

La estación del tren quedaba en la avenida constitución, frente a lo que es hoy en día el Centro Comercial “Estación central”, antigua empresa Telares de Maracay.

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La foto que continúa abajo es tomada recientemente guardando una relación en sentido con la antigua estación la cual fue convertida en un módulo policial que puede verse al fondo de la parada.

Foto tomada por mi nieto con su Teléfono a petición mía

Mi Maracay, conserva memorias, mucho más en cada uno de nosotros que en forma física, pero tiene paisajes naturales como el parque Henri Pittier, playas como Ocumare de la Costa de Oro, Choroní que son referencias internacionales en materia de turismo.

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Aquí crecí, trabajé, metí la pata varias veces, conocí a mi esposa, me casé, tuve a mis hijos, compre mi casa, despedí parte de mi familia que reposan en paz, y compartí con grandes amigos, fiestas, parrandas, amores y alegrías.

Foto del álbum familiar de mi esposa

Gracias a los administradores @marcybetancourt @solperez y @venezolanos por su amable atención