Amiga qué historia tan hermosa, me encanta como ese turbio hecho de haber sido abandonada lo hayas empañado con la dulzura de las flores.
Regina, Juan y Ana tuvieron la suerte de encontrarse o simplemente Dios los cruzó en el camino en la puerta de la iglesia.
Me gustó mucho tu historia, gracias por la invitación y éxitos siempre amiga!
Hola amiga, gracias por tu apoyo.
Dios siempre cuida a sus hijos, y colocó a Ana donde recibiría todo el amor que se merece.
Me alegra que te haya gustado.
Saludos amiga, te deseo mucho éxito.