Relato: Avispa en su camisa
¡Cordiales saludos comunidad!
Tito conducía su motocicleta a toda velocidad por la autopista, como hacía calor llevaba la camisa abierta, el viento le azotaba los brazos y la cara, era la hora de más tránsito vehicular, un carro lo seguía de cerca, otro iba delante y un camión lo iba pasando por la izquierda.
Repentinamente una avispa se posó en su pecho descubierto y le clavó su aguijón en la axila la avispa trató de levantar el vuelo pero la fuerza del viento no se lo permitía, esta vez la avispa le clavo el aguijón en la espalda y después en el estómago, Tito pensó no me atrevo a parar, estoy atrapado por lo vehículos debo mantener la calma, por que si trato de salir puedo provocar un accidente.
La avispa volvió a picarlo, Tito pensó que si pudiera manejar la motocicleta con una mano y con la otra aplastar a la avispa, pero luego se dijo que sería inútil tratar de atrapar la avispa dentro de su camisa, fingió que todo estaba bien.
De modo que eso fue lo que hizo, avanzó por la ruta con una sonrisa en el rostro y actuando como si lo estuviera pasando muy bien, pero en realidad se sentía desesperado.
Tito pudo finalmente salir hacia un camino lateral, se quitó la camisa y la avispa se fue volando, contó seis dolorosas picaduras en su cuerpo.
Tito comentó posteriormente de esa experiencia, en nuestro alrededor hay muchas personas que tienen avispas dentro de su camisa, pero finge estar de lo más bien, como un mal habito, una situación familiar, algún pecado, deja de fingir y deja todo en las manos del Señor tu Dios.
Cuando tenemos éxito y dejamos de lado nuestras avispas aunque sea por un día, recompénsate a ti mismo. Es confuso tratar de encontrar una salida en los complicados corredores de un laberinto, pero si miras este laberinto desde un punto alto de observación, verás el camino que debes seguir para encontrar la salida.
No hay lugar en el que se pueda estar o en el que se pueda ir, donde Dios no esté presente, es imposible para las personas estar lejos de su presencia, porque el vive en nuestro propio ser y llevamos con nosotros toda la protección y paz que podamos necesitar.