NO SE CANSE DE CREER
San Marcos 5: 24-29
24 Así que fue con él; y le seguía una gran multitud, y le apretaban.
25 Pero una mujer que durante doce años sufrió de hemorragia,
26 y había sufrido mucho de muchos médicos, y gastado todo lo que tenía, y no había usado nada, antes estaba peor,
27 Cuando oyó hablar de Jesús, vino de atrás entre la multitud y tocó su manto.
28 Porque dijo: Si tan solo tocara su manto, seré salvo.
29 Y al instante se secó la fuente de su sangre; y consideró en el cuerpo que estaba sano de ese flagelo.
Esta mujer escuchó acerca de Jesús:
La mujer que sufrió un torrente sanguíneo enseña que para tener fe hay que escuchar, porque cuando escuchó de Jesús lo buscó para sanar. En este caso tampoco hubo historia de que tocando la ropa de Jesús alguien pudiera sanar, pero ella no lo pensó, pero, cansada de haberlo intentado todo, se dejó convencer por la fe en lo imposible.
Escuche la palabra del Señor, especialmente la que motiva su fe, porque es la única forma de avanzar. Esta mujer ya había superado la parte difícil: buscar la curación durante doce años, por lo que solo le quedaba lo más fácil: tocar el manto de Jesús.
Por supuesto, eso requirió fe y creer no es fácil, pero lo hizo y fue sanado. Quizás te des cuenta de que la solución a tu problema ha pasado ante tus ojos y no la has visto porque es tan fácil que no te lo crees. Jesús nunca complicó nada para nadie. Para recibir una bendición, la gente solo tenía que creer que lo ridículo o simple era efectivo.
Esta mujer tuvo fe en todo.
No tengas fe por algo sino por todo. No creas solo en tu salud, sino en tu prosperidad, en la restauración de tu hogar, en la felicidad de tus generaciones. Ese es el nivel de fe que Dios quiere ver en nosotros.
Esta mujer declaró:
Si tan solo tocara su capa.
Es en ti que Dios hace algo. Él quiere hacerlo, pero eres tú quien desata la bendición al creer y confesar que se hará lo imposible.
Jesús nunca falla
En la vida tus padres, tus hermanos, tu marido, tu pareja, tus amigos o compañeros te pueden fallar, pero Jesús no falla.
Olvídate de los fracasos porque el Señor puede hacer todo si le muestras que crees con el corazón. No lo dudes, siempre te dará la mejor opción.