Hace unas semanas atrás muy temprano en la mañana grabé un espontáneo video de una colorida y peculiar mariposa. Muy amablemente ella permitió que me le acercase, desplegó sus elegantes alas presumiendo sus hermosos colores, yo intentando corresponder correctamente a su delicada invitación procuro no ser brusco y disfrutar nuestro encuentro. Nuestro momento espontáneo fue solo unos cuantos segundos, luego de despedirnos busco la grabación y comienzo a disfrutar los pocos segundos que pude capturar, curiosamente vino a mi mente este versículo de Romanos 12: 2 donde el apóstol Pablo nos insta a ser transformados por Dios. La palabra “transformar” usada en este versículo hace referencia al término metamorfosis. Desde esta perspectiva Dios insiste en encaminarnos a una dimensión nueva de lo que realmente significa ser transformado por EL, esta es una forma más profunda y genuina, capaz de disipar las oscuridades y mal formaciones en nuestro interior para que reluzca la luz y la vida misma de Dios. Esta forma de vida es la única capaz y suficiente para vencer la tentadora y errada manera de vivir que ofrece el sistema del mundo. La metamorfosis que Dios aplica en nosotros nos hará hallar su hermosa voluntad y propósito para cada uno de nosotros, esta voluntad siempre será el reflejo de todo lo bueno, de todo lo agradable y lo perfecto que es Dios.

Metamorfosis es el proceso por el cual debe pasar la oruga para lograr convertirse en una colorida mariposa. Pablo conocido como el apóstol de los gentiles, hombre de profundo pensamientos, de innumerables escritos y de múltiples idiomas emplea este término que nosotros conocemos como metamorfosis, ésta hace alusión a una transformación absoluta, profunda, un cambio total y rotundo a la forma o estado que tenemos. La palabra metamorfosis procede del latín metamorphōsis y del griego metamórphōsis. Esta palabra está formada por “meta” que quiere decir, (más allá o después de), “morph” habla de (forma o estructura) y “osis” indica (acciones o condiciones).

Este moribundo mundo con sus tendencias ofrece conductas, conceptos y maneras de vivir contraria a Dios, sus corrientes de pensamientos corren aceleradamente para atacar sin piedad nuestra fe, su énfasis parte desde lo externo, su esencia es relucir todo lo que se pueda mostrar desde la apariencia, cuando la realidad es que Dios ve es el corazón, lo interno es lo que tendrá importancia para Dios y relevancia en lo eterno, lo externo siempre será temporal, tendrá fecha de vencimiento. La metamorfosis de Dios en nuestras vidas produce un cambio desde el corazón, de adentro hacia afuera, un cambio que surge desde lo interno manifestándose en externo. Hoy Dios nos invita abrazar como personal la recomendación del apóstol Pablo, permitamos ser transformados por Dios, permitir ser cambiado de nuestra errada manera de pensar, dejar que Dios nos mude el corazón más cerca de Él y así poder comprobar y disfrutar lo bueno, agradable y perfecto que tiene su voluntad para cada uno de nosotros.

Aquí les regalo este pequeño video donde pude capturar la visita de la hermosa mariposa, instrumento que Dios usó para recordarme su intención de seguir transformando mi vida.