Caramba amigo, la diosa del estanque estaba esperando que fueras deshonesto, pero el hecho de ser honesto a la diosa le importó un pepino.

Así son los demonios manipuladores de nuestros anhelos con trampas preconcebidas, los honestos parecen que nunca serán premiados. Así es el mundo actual, los antivalores llevan la delantera.

Pero no todo siempre será igual, ya llegará el momento de brillar y ser reconocidos, eso valdrá mucho más que las falsas hachas de oro que sirven como señuelos.

Ser o no ser, he allí el problema...

Gracias por compartir,
¡Un fuerte abrazo!