El alimento que da vida al espíritu
En varias ocasiones Jesucristo describió la Palabra de Dios como un alimento, en la tentación citó no solo de pan vivirá el hombre sino de toda palabra que sale de la boca de Dios, si estamos sustituyendo un alimento por otra cosa esa otra cosa debe cumplir la función de alimentar. También pudo decir mi comida y mi bebida es que haga la voluntad de mi Padre.
Podemos fingir de primera mano que entendemos lo que Jesús quiso decir pero sin intentar explicar o profundizar pasamos página hacía otros temas. En realidad creo que analizar las palabras dichas es la base fundamental para el crecimiento espiritual de todos los que hemos creído en Jesús. Por eso hoy el artículo busca analizar estas palabras entendiendo que si se ha nacido de nuevo se es niño (espiritual) y como todo niño se necesitan alimentos para poder crecer y desarrollarse.
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Cuando Dios intenta explicarnos un asunto de diferentes maneras en el tiempo y es insistente en ello debemos comprender que se trata de algo muy importante y aunque a veces nos sumergimos en el momento histórico de los hechos es necesario usar una perspectiva más amplia para lograr comprender o descifrar el mensaje que se nos intenta hacer llegar.
Así nos remontamos a la época en la que Israel salió de Egipto por mano de Dios, aquí nos enfocamos solo en aquello que queremos resaltar: Había una multitud hambrienta en un lugar donde era imposible adquirir alimentos (el desierto).
Dios envía alimentos que caen del cielo en forma de lluvia (maná) para alimentar a esa multitud a la cual el llama "su pueblo". Encontramos aquí lo que podríamos considerar un gran milagro de provisión. Un alimento que vino del cielo para que los cuerpos de aquellos necesitados pudieran ingerirlos y seguir con "vida".
Luego, muchísimos años después. Observamos a Jesús frente a una gran multitud hambrienta en un lugar donde no se podía conseguir alimento para ellos, pero esta vez ellos no clamaban por comida. He de suponer que estaban en esa situación porque querían escuchar a Jesús, ver los milagros o cualquier otro motivo que por voluntad propia los hizo estar en esa situación.
Cuando Jesús los miró tuvo compasión de ellos, aquí fue la compasión de Jesús la que le lleva a realizar un nuevo milagro de provisión y de nuevo el PAN toma protagonismo en el asunto, así hubo una gran multiplicación en los alimentos y todos comieron hasta saciarse e incluso hubieron muchas sobras. Podríamos considerar que este milagro tiene el propósito de recordar el anterior y abrir las puertas para el mensaje que nos acercaría mas al propósito de estos hechos.
Ahora póngase en los zapatos de aquellos que disfrutaron de este milagro hecho por Jesús y luego le siguieron al otro lado del mar para encontrar a Jesús describiéndose a sí mismo como el verdadero PAN que descendió del cielo. Pero luego para dejar las cosas "un poco mas claras" dice que debemos comerlo, si, comerlo a ÉL, su carne, su cuerpo. Como si fuésemos zombies hambrientos o algo así.
Juan 6 RVA-1960
51 Yo soy el pan vivo que descendió del cielo; si alguno comiere de este pan, vivirá para siempre; y el pan que yo daré es mi carne, la cual yo daré por la vida del mundo.
52 Entonces los judíos contendían entre sí, diciendo: ¿Cómo puede este darnos a comer su carne? 53 Jesús les dijo: De cierto, de cierto os digo: Si no coméis la carne del Hijo del Hombre, y bebéis su sangre, no tenéis vida en vosotros. 54 El que come mi carne y bebe mi sangre, tiene vida eterna; y yo le resucitaré en el día postrero. 55 Porque mi carne es verdadera comida, y mi sangre es verdadera bebida. 56 El que come mi carne y bebe mi sangre, en mí permanece, y yo en él. 57 Como me envió el Padre viviente, y yo vivo por el Padre, asimismo el que me come, él también vivirá por mí. 58 Este es el pan que descendió del cielo; no como vuestros padres comieron el maná, y murieron; el que come de este pan, vivirá eternamente. 59 Estas cosas dijo en la sinagoga, enseñando en Capernaum.
Si los que estaban en el lugar hubieran tenido la certeza de que estaban escuchando hablar a Dios mismo tal vez en ese instante se hubieran convertido en caníbales. Pero... ¿Estaba Jesús llamándoles al canibalismo? es necesario recordar lo dicho al principio de este artículo, Jesús había hecho referencia a la PALABRA DE DIOS como alimento.
Respecto a esto encontramos al inicio del evangelio citado que JESUS es descrito como LA PALABRA que se hizo CARNE y habitó entre nosotros. Ahora es un poco mas confuso pero para comenzar a aclarar un poco las aguas veamos lo que les dijo el mismo Jesús a sus discípulos sobre el asunto de comer su carne:
Juan 6 RVA-1960
63 El espíritu es el que da vida; la carne para nada aprovecha; las palabras que yo os he hablado son espíritu y son vida.
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Ahora Jesús define que aquello que debemos comer son "las palabras que Él habló", de nuevo encontraremos a Jesús en la Santa Cena entregando PAN para ser comido en representación de su cuerpo. Siendo todo lo anterior actos simbólicos repetitivos mediante los cuales Dios daba entender que ahora era posible que Jesús formase parte de nosotros en nuestro ser interior de manera que nuestra forma de ser y actuar sea una copia de la de Él.
Se describe en la biblia como esclavos a los que no han creído en Jesús y parece que el unico camino a la libertad de la esclavitud del pecado es conocer a Jesús conocerás la verdad y esta te hará libre. ¿Recuerdas que un recién nacido no conoce ni siquiera el lenguaje local? pasa lo mismo con el nuevo nacimiento y la única forma de crecer es indagando la PALABRA DE DIOS para obtener el conocimiento que nos hará permanecer en la vida.
Usted a menudo podrá encontrar personas que queriendo ser Cristianos e identificándose como tal, comenten actos decepcionantes, y es muy fácil para nosotros juzgarles a ellos y a los que se parezcan a ellos. La verdad, el cambio no ocurre de forma instantánea y así como un niño no nace apto para ir de una vez a un empleo profesional el cristiano no se convierte de la noche a la mañana.
El conocimiento que viene mediante la Palabra de Dios es el alimento que forma nuestro espíritu y transforma nuestra mente, pero esta es una práctica que debe realizarse tanto como practica el alimentar su cuerpo e incluso mas. De lo contrario será uno mas con muchos años siendo cristiano sin experimentar ningún cambio en su vida.
Gracias una vez más por tomarse su tiempo para leer este artículo que espero haya sido de bendición para tu vida.
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