LAS DISCUSIONES COMO FACTOR NEGATIVO EN LAS RELACIONES PERSONALES.
Las discusiones dentro de las relaciones personales pueden ser una herramienta útil para entender y solucionar problemas. Sin embargo, cuando se pierde el control es un factor negativo, puesto que lo único que consiguen los involucrados es dañar la confianza y la buena relación.
Es normal tener diferencias con nuestros seres queridos y debatir sobre ellas. El problema surge cuando la conversación se vuelve irracional, estallan las voces altas sin llegar a algún entendimiento real. Estas conversaciones destructivas son muy comunes y suelen provocar choques emocionales en ambos participantes, ya que traspasan los límites de lo aceptable. Esto sólo genera desconfianza, resentimiento y distancia en la relación personal o de pareja.
Además de ser peligrosamente extremadas emocionalmente, estas discusiones impiden pactar soluciones realistas porque ninguna parte escucha a la otra con la atención adecuada para lograr algo. Las ideologías cambiadas no mejoran ni resuelven el conflicto; simplemente embrutecen más el tema primario que estaban debatiendo inicialmente. Es importante recordar qué hay cosas en nuestra vida más importantes que ganarse un argumento frente a nuestras amistades o familiares cercanos; si no nos interesa mantener el respeto mutuo con ell@s mejor aprender a controlarnos e incluso optamos por evitar discutir determinados temas sensibles para tod@s los involucradas .
Por supuesto no es sencillo evitar hablar sobre temores profundos acumulados entre amigoss/familiares después de grandes conflictos pasados ,
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