Las garrapatas.
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¡Estos bichitos son horribles!
Por estos lados abundan en época de calor y es muy difícil eliminarlas completamente, uno de los casos más recurrentes que tenemos son perros rescatados con garrapatas enfermos con Ehrlichia
Es una enfermedad de distribución mundial causada por la Rickettsia Ehrlichia canis, que se transmite a través de garrapatas del género Rhipicephalus sanguineus o bien por transfusión sanguínea de sangre infectada.
La enfermedad aguda es estacional, presentándose la mayoría de casos en primavera y otoño, época de presencia de garrapatas, aunque la fase crónica de la enfermedad puede diagnosticarse durante todo el año. Los signos de infección aguda son: fiebre, depresión, anorexia, petequias, epistaxis, signos neurológicos, edema escrotal y linfadenopatía. Fuente
Es una enfermedad de fácil tratamiento y buen pronostico si se detecta a tiempo.
Las garrapatas
Son parásitos externos de distintas especies de animales, que se clasifican como ácaros, parientes cercanos de las arañas.
Las garrapatas constituyen uno de los grupos de parásitos externos más importantes que existen, no solo por los daños directos que ocasionan al ganado, a los animales de compañía y a las especies silvestres, sino también por la gran cantidad de enfermedades que transmiten.
Las garrapatas poseen características biológicas inusuales que contribuyen a su éxito reproductivo y su potencial como vector o transmisor de enfermedades infecciosas. Una de las más sobresalientes es su extraordinaria longevidad.
Hoy tenemos una serie de productos que nos ayudan a combatir las garrapatas: jabones, talcos, pipetas, collares y uno de los últimos lanzamientos es una pastilla que con una sola dosis protege al perro por 1 mes, todavía son bastante costosas por lo que nosotros optamos por los baños repelentes y talcos.
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Es importante proteger a los perros contra estos parásitos no solo por la salud de ellos sino que trasmiten enfermedades a las personas también, como dice el famoso dicho 'mas vale prevenir que curar"
Por suerte aquí en Buenos Aires no es tan frecuente. Sólo una vez a un perrito mío lo agarraron un par. Pero con la pipeta se los mantiene bien.
Me imagino lo incómodos que se deben sentirse con estos horribles y molestos bichos en sus pelajes.