Dormido

Gracias a Dios que aún estoy dormido
porque puedo contemplar tu recuerdo,
ahí donde la luna no ha caído,
y el alba aún me encuentra cuerdo.

Porque mis manos te sienten en la bruma
porque mi cuerpo inmóvil se niega a levantarme
mientras admiro tu rostro que se esfuma
para nunca jamas acompañarme.

Gracias a Dios, amor que no lamento
que sea tan poco nuestro tiempo juntos
porque esta noche en mi pecho lo presiento
también puede soñarse a los difuntos.