Como era de esperarse, después de escuchar las instrucciones del Director General de MyBudget, Timothy y Jhon, seleccionaron el equipo de ingenieros y programadores para el proyecto. Inicialmente, algunos nombres fueron puestos sobre la mesa, aunque su indisponibilidad limitó la lista del personal elegible; el primer obstáculo que tuvieron que sortear.

Después de analizar las necesidades y requerimientos, optaron por reclutar a Mariam, analista de sistemas y diseñadora de base de datos; SQL Server, era su fuerte. Así mismo, reclutaron a Gabriel, experto en Javascript, CCS y HTML; y por último, Alexei, un hábil programador en lenguaje C y Python. Aunque todos tenían experiencia en proyectos desarrollados en MyBudget, era la primera vez que trabajarían en equipo, algo que pareció irrelevante.

—¡Buenas tardes, señores! Fueron seleccionados para formar un equipo de trabajo y desarrollar el software de un importante cliente dedicado al alquiler de coches. Sabemos que son excelentes profesionales. Su experiencia dentro de MyBudget habla por ustedes. Dentro de poco nos volveremos a reunir para indicarles las pautas del proyecto. —comunicó Jhon a los seleccionados.

Posteriormente, ambos se reunieron una vez más con el Director General de la empresa; era el momento de plantear su idea inicial e informar los nombres de los ingenieros seleccionados.

—Permiso, Señor director. —dijo Timothy antes de ingresar junto a Jhon a la oficina del Director.

—Tomen asiento, por favor. —indicó el Director General.

Una vez sentados, fue el momento de plantear la propuesta.

—¿Supongo que han venido a plantear su idea para el proyecto?. —preguntó el Director General.

—Así es, señor. Analizamos los requerimientos, y llegamos a la conclusión que podemos implementar exitosamente las demandas del cliente. —indicó Timothy.

—Al grano. —pidió el Director General.

—Podemos diseñar un paquete inteligente que atienda la demanda de coches. Para ajustar parámetros en tiempo real, entrenaremos una red neuronal que maneje las horas punta y controle promociones y tarifas, manteniendo un margen de ganancia. Se considerará el tráfico, distancia, horas nocturnas, clima y eventos especiales. Estará integrada al software. El cliente quedará satisfecho. —expuso Jhon.

—Espero que no sean falsas promesas. ¿Quiénes son los ingenieros seleccionados para el proyecto? —preguntó el Director.

—Mariam, para bases de datos; Gabriel y Alexei, para el Frontend y el Backend. —mencionó Timothy.

—Buenos nombres, aunque será la primera vez que conforman equipo. No quiero inconvenientes con este pedido. Ustedes son los responsables ante mí. —dijo el Director.

—¿Pueden culminar en el lapso de tiempo requerido? —preguntó luego.

—Bueno, consideramos que seis semanas es un periodo corto. Necesitamos ocho semanas para culminar, señor. —manifestó Jhon.

—Seis semanas es el tiempo designado. No hay más. Si fallan las pérdidas serán grandes y sus puestos estarán comprometidos. ¿Comprendieron? —hizo énfasis el Director.

—Muy claro, señor. —respondieron Timothy y Jhon al unísono.

Durante las siguientes semanas, el equipo trabajó incansablemente. Mariam desarrolló la base de datos junto a una serie de sentencias SQL para los reportes del sistema. Gabriel diseño el Frontend bajo la constante supervisión de Thimothy. Por su parte, Alexei optimizó algoritmos en el Backend; la lupa de Jhon estaba observando. Todo marchaba viento en popa.

Sin embargo, cuando parecía que lo habían logrado, surgieron una serie de errores que le pusieron los pelos de punta a Jhon.

—Esto no debe pasar. Nuestras cabezas están en juego. ¡Si fallamos, ustedes también se irán con nosotros! —expresó Jhon, muy molesto.

—Cálmate, Jhon. Relájate y permite que los muchachos corrijan las fallas. —dijo Timothy.

—¿Quieres que me calme? ¡Faltan tres días para entregar el proyecto! —dijo Jhon.

—Han hecho todo como lo hemos solicitado. Debe ser una tontería. —dijo Timothy.

—Espero que sea así. —contestó Jhon, nervioso.

Mariam, Gabriel y Alexei redoblaron esfuerzos y limitaron sus horas de descanso bajo los efectos de la cafeína. Durante los siguientes dos días, revisaron el proyecto línea a línea y detalle a detalle, y finalmente dieron con el problema: incongruencias en los nombres de algunas variables.

—Justo a tiempo, Jhon. Aunque estamos sin chance de hacer una evaluación final. Preocupémonos solo por la opinión del cliente. —dijo Timothy.

—Dios mío, que todo salga bien. —pidió Jhon.

La hora de entregar el proyecto llegó; la presentación del software al cliente fue en la sala de reuniones junto al Director General. La cara del jefe indicaba inconformidad; no recibió una exposición preliminar. Ambos gerentes estaban nerviosos; solo les quedaba confiar.

La prueba tardó veinte minutos. El cliente observó atentamente; no perdió detalles. La seriedad de su rostro elevó la tensión; parecía insatisfecho. Timothy y Jhon dependían de su opinión; el calor bajo sus trajes era un reflejo de la presión.

—¿En cuanto tiempo puede ser puesto en marcha? —preguntó el cliente.

—Inmediato, señor. —expresó Jhon.

—¡Excelente! Gran trabajo. —expresó el cliente sonriendo.

El semblante del jefe finalmente cambió, dejando entrever gestos de satisfacción.

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