Qué difícil es capturar una mariposa! ¡Y cualquier volador! Ésta es la primera vez que he logrado capturar una con la cámara de mi celular. La vi revoloteando y decidí aprovechar la oportunidad, pero se posó bastante alto entre las flores. No fue fácil. Ésta es la fotografía original, sin edición alguna.
En la siguiente, una edición de la misma intentando aproximarla.

Otra captura después de un nuevo revoloteo, revela una ala rota. Afortunadamente puede volar pero eso explicaría, tal vez, sus vuelitos cortos. Mientras estaba atenta a esta sesión fotográfica, otra mariposa con idénticos colores voló hasta el arbusto, pero tras un breve toque en las flores desapareció en el aire.

Un acercamiento de esta fotografía permite observar mejor el ala incompleta, que no se veía desde el ángulo de la anterior fotografía.

Después de varios intentos infructuosos para obtener una fotografía mejor, dejamos atrás las perfumadas y hermosas flores con su bella visitante que permaneció dando giros y estacionándose en distintas flores del mismo arbusto.