Reverón en tres tiempos cinematográficos. Periplos, Revista de Arte y Literatura. N° 2

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Reverón en tres tiempos cinematográficos / @marcybetancourt*

Hola, amigos de Steemit.

La siguiente publicación es un aporte para el segundo número de Periplos, Revista de Arte y Literatura que edita el @equipocardumen. Se trata de un recorrido cinematográfico, a través de tres cineastas, en la vida y obra del artista plástico venezolano Armando Reverón.

Armando Julio Reverón Travieso nació en Caracas, Venezuela, el 10 de mayo de 1889. Es considerado, por varios críticos, el pintor venezolano más relevante del siglo XX en el país. Su obra se enmarca en tres momentos pictóricos: azul, período que abarca desde 1915 hasta 1924, influenciado por su viaje a España, las obras postimpresionistas y Las meninas de Velásquez. Sin embargo, el ilustrador ruso Nicolás Ferdinandov, su amigo y compañero de aventuras en el litoral venezolano, fue quien principalmente marcó la fluidez del pincel de Reverón en esta primera etapa.

Foto de Ricardo Razetti. Fuente.

En el siguiente período blanco, desde 1926 hasta 1936, exploró los efectos de la luz del trópico. Allí, en estas obras, se revela la incesante búsqueda de lo inalcanzable: “atrapar la luz”. Es un período de trasmutación con golpes de pincel y brochazos, de marcos nuevos, de poesía visual.


El último período conocido como sepia cierra su cromática y se ubica en los años finales de la década de los años 30 y principios de los 40 del siglo XX, sin tener una precisión exacta de estas fechas. En sepia, Reverón narra apasionadamente, con todos los objetos construidos por él mismo, provocando distintas sensaciones sensuales y estéticas.

En el año 1953 obtuvo el Premio Nacional de Pintura, mientras estaba recluido en el sanatorio psiquiátrico de San Jorge, en Catia (Caracas). Un año más tarde fallece en esa ciudad, el 18 de septiembre.

Armando Reverón ha sido reseñado fílmicamente en varias oportunidades. Para el caso de esta publicación, nos ocuparemos de tres obras que tienen un lugar especial en la cinematografía venezolana y que, además, fueron realizadas por cineastas cuyos trabajos son emblemáticos en el cine venezolano.

Reverón, de Edgar J. Anzola (1938-1939)

La dama de la mantilla (s/f). Colección María José Báez. En: Reverón, 1989, de Luis Pérez-Oramas.

No existe una fecha precisa para la película de Edgar Anzola. Algunos documentos de la Cinemateca Nacional señalan que el estreno de este documental fue el 01 de febrero de 1939; sin embargo, en otros documentos publicados por la Fundación Cinemateca Nacional, como “Panorama histórico del cine en Venezuela”, ubican la fecha de este filme en 1938.

Los años de producción datan desde 1934 a 1938; fue realizada en formato de 16mm con una duración de 41 minutos. Edgar Anzola, además de dirigir la película, hizo la dirección de fotografía y el guión.

Este valioso documental, el primer trabajo fílmico que se le hiciera al pintor, revela la vida cotidiana de Reverón en su hogar de Macuto, “El Castillete”, junto a su compañera inseparable Juanita.


Fuente

Indudablemente, la amistad entre Anzola y Reverón propició una serie de escenas íntimas que describían los rituales del artista cuando se disponía a pintar. Para esta década, ya Reverón había pasado por su período azul y se encontraba en uno de sus momentos de máxima creatividad. De esta manera, el filme también contiene escenas de las visitas a Caracas para exponer parte de su obra en el Museo de Bellas Artes.


Lo más relevante de esta película, además de ser la primera que lo proyecta en el espacio cinematográfico, es que el ya experimentado Edgar Anzola muestra los niveles de sensibilidad cultural y compromiso del cine venezolano.

Igualmente, Anzola pudiese alardear de su ojo crítico y visionario por presentar a quien posteriormente se convertiría en referencia obligada de la plástica nacional.

Reverón, de Margot Benacerraf (1951-1952)

Margot Benacerraf en el rodaje de Reverón. En: Cuadernos Cineastas Venezolanos, 2009. Fundación Cinemateca Nacional, Venezuela.

Bajo la producción de Caroní Films C.A., la novel cineasta venezolana Margot Benacerraf dirige y hace el guión de este documental. La película fue realizada en formato de 35mm, con una duración de 30 minutos, y un impecable trabajo de dirección de fotografía de Boris Doroslovacki. El filme fue sonoro y la locución la realizó Carlos Augusto León, mientras que la música estuvo a cargo de Guy Bernand.


Este documental obtuvo una mención especial en el Festival de Berlín (1953) y participó en los Festivales de Cannes y Edimburgo (1953), así como en Mannheim (1956).

Para esta década Armando Reverón no pintaba. Su enfermedad de esquizofrenia y crisis nerviosas lo había alejado del arte donde volcaba su temperamento.

Benacerraf, que se encontraba en Caracas en el año de 1950, hizo una revisión exhaustiva de los documentos que existían sobre la vida y obra de Reverón. De manera natural, pero brillante, se plantea un guión en retrospectiva a partir de un autorretrato, donde los períodos cromáticos de Reverón serían mostrados con las diferentes luces del día. Así, la época azul coincidiría con el amanecer, la época blanca con la intensidad del sol de mediodía y la época sepia con el ocaso.

Cinematográficamente, Benacerraf hace un trabajo estético mucho más avanzado que el presentado por Anzola. Ella no sólo logra captar el mundo interior del artista, sino que ahonda en los fetiches de los espacios sagrados de Reverón.

Autorretrato. En: Cuadernos Cineastas Venezolanos, 2009. Fundación Cinemateca Nacional, Venezuela.

Durante la filmación y a modo de anécdota en una referencia publicada por Cuadernos Cineastas Venezolanos (2009: 21), editado por la Fundación Cinemateca Nacional, Venezuela, cuenta Margot Benacerraf que:

Reverón le pidió ver por el “huequito” de la cámara para “ver” lo que ella veía. Él se percató de la forma en que colocaba la luz hacia las muñecas, cómo las acomodaba y cómo dejaba todo listo para el encuadre. Entonces, exclamó:
-¡Ah, pero es como la pintura!

A partir de ese momento, y sin titubeos, aceptó todas las indicaciones que ella le daba para filmar.

Benacerraf y Reverón afianzaron una amistad que surgió durante el rodaje de la película. Él vuelve a pintar, un autorretrato, para el documental de esta directora, mientras ella hace la última filmación del artista con vida. Además, es importante acotar que la cineasta presentó al pintor con una profunda honestidad y respeto.

Reverón, de Diego Rísquez (2011)

Afiche promocional de Reverón

Película de ficción producida por el Centro Nacional Autónomo de Cinematografía (CNAC), Producciones Guacamaya y Pedro Mezquita, en formato de 35mm, con una duración de 110 minutos. El guión fue realizado por Diego Rísquez, Armando Coll y Luigi Sciamanna, la fotografía de Cezary Jaworski y la música de Alejandro Blanco Uribe. Narra la historia de artista plástico desde el año 1924 hasta 1954 con su inseparable Juanita, sus amigos que frecuentaban “El Castillete”, sus manías, sus excentricidades y -por supuesto- su genialidad en la pintura.


Esta película tiene en los roles principales a Luigi Sciamanna (Armando Reverón), Sheila Monterola (Juanita de Los Ríos), Luis Fernández (Nicolás Ferdinandov), Antonio Delli (Alfredo Boulton), Héctor Manrique (Óscar Yánez), Prakriti Maduro (Luisa Phelps) y Adrián Delgado (Vicente Gerbasi).

Diego Rísquez hace un extraordinario trabajo visual para presentar lo que él percibe del artista plástico. Parafraseando al director, la obra de Reverón es la antítesis del colorido Caribe con el blanco dominando todos los colores.
El cineasta, cuya vida estuvo ligada a las artes plásticas, logra hacer una película que no se queda en lo biográfico-histórico, sino que -en su libertad creativa- trae a su Reverón a las nuevas generaciones y complace con guiños referenciales a quienes conocieron al artista de Macuto.


Luigi Sciamanna en el rol de Reverón

Es de especial atención el trabajo actoral de Luigi Sciamanna, quien también participó en el guión. Su entrega, profesionalismo, dedicación y disciplina permitió mostrar una imagen de Armando Reverón lleno de vida, intensidad creativa, apasionado, loco y genio.


Entre Rísquez y Sciamanna reconstruyen un personaje que de por sí dejó huellas muy profundas y reales, por su excéntrica personalidad. Este Reverón, en la ficción, es menos dramático y más lírico. Es un hombre que transforma su entorno, crea su universo y se aísla en él para inventar su propia sobrevivencia.

La entrega del Reverón de Rísquez está llena de los demonios que siempre cautivaron a este director: el desmontaje de arquetipos, su interpretación de personajes de relevancia histórica, la utilización de la cámara como pincel, las escenas-caballete en controvertidas imágenes surrealistas y, lo que considero más relevante, la insistencia de obligarnos a vernos, los venezolanos, desde nuestros valores.

Gracias por su lectura y bienvenidos sean sus comentarios.

Saludos infinitos


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@marcybetancourt (Marcy Betancourt)*. MSc. en Planificación del Desarrollo Regional. Actualmente Coordinadora del Cine Club UDO “David Suárez” de la Universidad de Oriente – Núcleo de Sucre. Promotor cultural con más de 25 años en el cineclubismo. Formación en Gestión de la Cultura y el Patrimonio. Coautora de los libros: Antología de un Taller (1998) y Antología de narrativa cumanesa 1950 – 2004 (2005).

Sort:  

¡Me encanto su trabajo! Mas aún por ser del gran Reverón. Abrazos =)

Gracias por pasar por aquí. Es un aporte al gran Maestro Reverón, visto por cineastas y por mí. Saludos @edwardstobia

Impecable, @marcybetancourt.

Me ha gustado mucho tu manera de enfocar el trabajo de cada cineasta, desde un acercamiento cálido, que nos permite intimar y enamorarnos otra vez de nuestro gran Reverón.

¡Felicidades y un abrazo!♥

(Regresaré para votar ☻)

Gracias por tu lectura @marlyncabrera. Creo que desde niña siempre admiré la obra de Armando Reverón. Aquí he tenido la oportunidad de presentarlo a través de otras miradas. Un abrazo

Hiciste un magnífico trabajo de registro informativo y de evaluación crítica, estimada @marcybetancourt, de lo filmado acerca de esa figura genial y fundamental de nuestra plástica, convertida en personaje casi ficcional. ¡Gracias! Un abrazo.

Gracias por todo el apoyo que me brindaron para animarme a hacer esta publicación. Tenía tiempo trabajándola pero se me dificultaba mucho terminarla por la falta de internet. Evalué varios documentales y los escogidos son los mejores por lo que quería mostrar. Rísquez que hizo un trabajo de ficción era infaltable porque redondeaba mi idea. Gracias nuevamente @josemalavem por todo tu apoyo

Magnífico @marcybetancourt, tuve la oportunidad de ver la versión Reverón, de Diego Rísquez y me fascinó, ahora buscaré las dos anteriores para ampliar mi criterio en cuanto a las referencias que hacen estos cineastas de Reverón. Como personaje y como artista me maravilla. Tu post excelente. ¡Abrazos!

Gracias por tu comentario @evagavilan. Reverón es indudablemente una referencia para los artistas plásticos venezolanos. No en vano el día de su nacimiento es la fecha escogida para celebrar el Día del Artista Plástico. Te van a encantar los documentales porque allí él estaba vivo y podemos tener otras lecturas de su trabajo. Saludos inmensos

Excelente y completo artículo divulgativo de Armando Reverón visto pos los cineastas. Este es un artículo de gran factura y calidad.

Gracias por tu visita @sansoncarrasco. Dos documentales en blanco y negro con Reverón vivo. Anzola presenta el momento máximo creativo; Benacerrat muestra al pintor ya maduro y el rodaje se da en pleno deterioro de sus nervios. Hago mucho incapié en el respeto, para el artista, que ella presentó en su filme. Rísquez hace un trabajo genial para recoger buena parte de la vida de Reverón, reconstruyendo incluso "El Castillete" para la filmación. Abrazos y saludos

Este trabajo me gusta muchísimo, @marcybetancourt. Reverón es uno de mis personajes favoritos. Encarnación del genio.
Tu exploración le hace justicia, sin duda. Merece estar en la blockchain. Abrazotes.

Un gran saludo @adncabrera. Sé que te gusta el mundo de la plástica y es un honor para mí que te haya gustado este trabajo sobre Armando Reverón -definitivamente un genio. Para esta publicación exploré con cuidado prácticamente todas las obras cinematográficas venezolanas (que son varias) que trabajaron a este artista y considero que también le hago justicia a los cineastas aquí presentados. Abrazotes, también, de mí para ti

Mi querida @marcybetancourt, este es un excelente recorrido cinematográfico por las películas que se han hecho en torno a la figura de Reverón. Se suma a toda esta belleza, el valioso reconocimiento que haces a los directores y a los actores. Interesante, además, la manera cómo narras las relaciones de amistad y respeto que había entre el pintor y los directores de cine. Es una conjunción de historias sobre el arte. Bravo por ti. Este post merece todos los votos del mundo.

Gracias por el entusiasmo con esta publicación. Espero que pueda leerlo mucha gente y que me aporten comentarios tan puntuales como los que tú haces. Un abrazo @solperez

Muy buen post,@marcybetancourt,muy informativo, ameno y crítico, no conozco la película de Diego Rísquez los otros documentales los pude apreciar mientras estudiaba en la UCV, te votaré.

De la película de Rísquez no me gusta el final pero fue un buen trabajo al estilo Risquezano. Gracias por tu apreciación @ramonochoag

Cronología del artista y sus documentalistas, a través de los ojos de los cineastas y del tuyo. Este post en si mismo un documento fundamental para quienes investigan, "nunca pasa de moda", la obra de Reverón. Felicito a los directivos de la Revista Periplos y a tí @marcybetancourt por haber logrado este artículo tan valioso. Un gran abrazo.

Gracias @antolinamartell, es muy valioso para mí tu comentario ya que vienes de las Artes Plásticas. Esta publicación es un breve recorrido por 4 artistas y, a mi parecer, quedó redondo. Abrazos

Un post para reconciliarnos con nuestro país, donde las riquezas espirituales, el genio, la inventiva, se decantan en obras artísticas fascinantes que no siempre son tomadas en toda su importancia. Gracias, @marcybetancourt.

Gracias @gracielaacevedo por tu comentario tan sentido. Siempre el arte nos une, nos reconcilia, nos encuentra... pasado, presente y, por qué no, futuro. Un abrazo

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