El barco que naufragó dos veces
Eran las 12:30 de un apacible y sorprendentemente caluroso 22 de enero para ese lugar tan austral de la República Argentina, el día anterior habían arribado a Ushuaia y ahora se dirigían a Bahía Lapataia, en realidad a unas 7 millas náutica de ésta, a la Bahía Yendagaia en Chile, en la margen septentrional del Canal Beagle.
El capitán Dreyer dio la orden al segundo oficial Rodolfo Hepe de utilizar el canal “Les Eclaireurs”, para ello le indicó que cuando marcara el Faro 140 grados a la derecha y el “Monte La Gloche” a 21 grados, cambiara el rumbo hacia el canal. A las 12:35 se encuentran los puntos indicados y se modifica el curso hacia el sur, según los mapas se estaba tomando el derrotero adecuado pero algunos minutos después el vapor de turismo “Monte Cervantes” de 150 metros de eslora y 19 de manga con 1.117 pasajeros y unos 330 tripulantes choca a estribor con unas rocas debajo de la línea de flotación.
El vapor se inclinó considerablemente a babor y cuando logró zafar de las rocas comenzó a hundirse.
Gracias a la rápida acción de la tripulación todos los pasajeros fueron desembarcados y alojados en Ushuaia y la mayoría de sus equipajes recuperados, esta buena noticia fue rápidamente opacada por otra que ocurrió unas horas más tarde. El capitán y una pequeña guardia quedaron en el barco para comenzar las tareas de reflotarlo, sin embargo en una acción no prevista y de sorprendente velocidad el barco se dio vuelta. La guardia logró salir a tiempo pero el capitán se hundió con el vapor.
Años más tarde, una empresa argentina de nombre Salvamar recibió la autorización para reflotar al Monte Cervantes, inmediatamente comenzaron las tareas. El buque estaba invertido y una parte del mismo estaba fuera del agua. Para desarrollar la titánica tarea de sellar el barco se estableció un campamento para la maquinaria, el personal y los buzos frente al faro Les Eclaireurs. Una vez totalmente sellado se inyectaría aire comprimido para reflotarlo.
Finalmente, el 3 de octubre de 1954 el buque fue reflotado.
La idea era remolcarlo hasta Ushuaia para luego proceder al desguace, para este trabajo se emplearon dos barcos de la Armada Argentina, el Chiriguano y el Guaraní, más un remolcador de la empresa Salvamar de nombre Saint Christopher. Cuando estaba siendo remolcado y a sólo una milla del puerto, el casco del Monte Cervantes se volvió a partir y se hundió por segunda vez.
Esta vez no tuvo suerte, el lugar donde ocurrió el hecho era más profundo (unos 100 metros) y jamás volvió a intentarse reflotarlo.
Sobre el accidente original hubo y hay todavía varias controversias, para comenzar sobre el capitán alemán a cargo de buque,Teodore Dreyer. Acerca de su muerte hay tres teorías: la primera que estando en el barco y al momento de dar la vuelta de campana tuvo un accidente y falleció; la segunda, más romántica, que volvió para hundirse junto a vapor tal como solía ocurrir en la antigüedad y la tercera que se escondió para fugarse y de esa manera evitar las responsabilidades que le cabían. Lo cierto es que el cuerpo jamás fue encontrado y hasta su viuda llegó a ofrecer una recompensa por información cierta sobre su esposo.
Otro misterio sin resolver fue la colisión en sí, algunos dicen que se confundió la ubicación del canal con la del faro ya que ambos puntos tenían el mismo nombre, otros aseguran que el mapa estaba equivocado y hasta hay un grupo que le endilga la responsabilidad al piloto.
Respecto al equipaje de los pasajeros también hubo inconvenientes, aparentemente hubo saqueos y varios equipajes se perdieron, al menos parte del contenido de los mismos. Lo cierto es que se conformó una comisión que le inició juicio a la empresa propietaria del buque pero sus demandas fueron desestimadas.
El Monte Cervantes pertenecía a la empresa alemana Hamburg Sud, entre 1922 y 1923 esta compañía encargó al astillero Blohm & Voss la construcción de 5 buques. Estas embarcaciones fueron destinadas al transporte de emigrantes, carga y transporte temporario de trabajadores desde la Península Ibérica hacia Sudamérica. Luego algunos de ellos se reconvirtieron en vapores de transporte turístico como fue el caso de nuestro barco que naufragó dos veces.
Héctor Gugliermo
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Qué historia hosgug, aprendemos en esta plataforma tantas cosas, y sucesos acaecidos que son increíbles. Este barco enorme refleja esas cosas increíbles que suceden y nadie se imagina. Gracias por tu interesantísima publicación
Muchas gracias @pastorencina por tus comentarios. Historias hay muchas de todo tipo, ésta particularmente me pareció muy interesante. Se que hay un libro específico sobre este naufragio pero no lo pude conseguir.
Es muy parecido al titanic pero es muy diferente en la parte de arriba es una buena historia estos barcos eran construidos muy grande en la época de antes
Si, es cierto. No había reparado en la figura, es muy parecido. Más chico y con solo dos chimeneas pero hace acordar bastante al Titanic. Supongo que tal como ocurre hoy en día con los automóviles se hacer de varias marcas y modelos pero las figuras son muy parecidas.
Que historia. Lo que ha de ser ver tremendo barco hundirse y el trabajo para sacarlo!
Siempre me pregunto cuantos barcos hundidos habrá en los oceanos.
Me gustó la historia porque es muy raro que un mismo barco naufrague dos veces! Barcos siniestrados debe haber miles en los océanos.
¡Parece que el mar lo reclamo como suyo!
y... puede ser. Quizás tuviera alguna deuda que saldar con el destino.
Los barco conllevan cierto misterio cuando ocurren cosas como estas, antes en la edad media era una aventura irse al mar, creo que los grandes aventureros fueron los vikingos supuestamente llegaron a estados unidos es decir lo que se conoce como america del norte, antes que los españoles siempre, un placer leerte mi querido amigo pescador con mosca.
jajaja. Ciertamente soy un aficionado a esa modalidad de pesca desde hace más de 20 años, me introdujo mi hijo que en esa época era un niño y vio por TV alguien que la practicaba y me dijo que eso le interesaba mucho. Comenzamos a practicar, hacer un curso, asociarme a un club, comprar equipos e inocularme el gen de la pasión y ahora lo hago solo porque el siguió su camino y no le interesa más.