Ansiedad en época de Viruses..
Tanto y tanto hemos escuchado sobre el tema del Viruses(le daré éste nombre al virus actual, ya que una amiga conocedora del tema astral, nos pide no nombrarlo mucho, ya que al hacerlo se le da más fuerza, hay que mencionarlo como deseemos para que disminuya la influencia que tiene sobre nosotros) en ese aspecto le doy un poco de razón. Ya que desde las practicas terapeuticas, nos dicen; resta importancia al tema que te afecta, dale otro nombre, centrate en otras actividades. Que tanta información aunada a las directrices que debemos cumplir de forma obligatoria, nos empuja en grandes momentos a una ansiedad desconocida por muchos de nosotros, que nos fuerza una construcción frente a una amenaza nueva que puede resultar devastadora.La situación vinculada a esta pandemia nos puede llevar a unos niveles de estrés que pueden incidir significativamente en nuestra calidad de vida, alguna de estas emociones pueden ser:
MIEDO: a perder la salud, contagio de familiares, falta de insumos, bulling por infectarnos, temor de contagio de parte de nuestros vecinos, es posible todos y más de estos pensamientos. Frente a ellos pueden surgir los más extremos como puedo morir, por mi causa puede morir algún familiar. Estos sentimientos pueden generar reacciones funcionales y reacciones disfuncionales. Entre las reacciones funcionales puede que surjan conductas creativas como por ejemplo retomar la pintura, retocar adornos, manualidades con reciclaje, actividades formativas como utilizar todos los elementos que actualmente ofrecen las redes sociales para capacitar en temas específicos de forma gratuita, y recreativas como retomar los juegos de niños en familia ludo, stop, domino, perinolas; entre otros. Pero, las reacciones disfuncionales que pueden incrementarse dado el tiempo de confinamiento pueden ser en extremo negativas como por ejemplo mantenernos viendo noticias, retuiteando estados, compartiendo enlaces no verificados.
FRUSTRACION: ésta situación nos genera sensación de pérdida de libertad ya que no podemos ni andar libremente por los espacios acostumbrados o deseados, ni decir de nuestras actividades personales. Surgen pensamientos como “no puedo terminar el trabajo” “quiero salir y no puedo”. Frente a ésta situación estamos obligados a ser pacientes y debemos generar nuevos hábitos. La misma dinámica nos mostrará cómo.
ENOJO: podemos pensar que ésta situación ésta siendo manipulada, que no existe, que simplemente es para obligarnos a mantenernos en resguardo y alejados del entorno para que no participemos en contralorías, pensamientos como “esto no es mi culpa, porque debo permanecer encerrado”, ”yo encerrado y otras personas no respetan la cuarentena” lo que nos puede empujar a tener conductas qe nos puede generar inconvenientes.
AMBIVALENCIA: es posible sentir alivio por estar en casa, sentir que la situación externa no nos tocará, pero también las emociones como el miedo, frustración, enojo también pueden surgir “ahora puedo hacer lo que nunca había podido, pero quisiera saber cuándo terminará todo esto”
Texto de mi autoría. Imágenes: google, pixabay y postimage.org